Los fiscales Carlos Stornelli y Carlos Rívolo apelaron a la decisión del juez Claudio Bonadio que procesó a Fernández de Kirchner como jefa de una asociación ilícita y solicitaron que se ampliara la imputación a 913 actos de corrupción.
Buenos Aires. Los fiscales que investigan el caso denominado como los “cuadernos de las coimas”, Carlos Stornelli y Carlos Rívolo, pidieron que la ex presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, sea imputada por 913 hechos de corrupción.
Stornelli y Rívolo apelaron a la decisión del juez Claudio Bonadio que procesó a Fernández de Kirchner como jefa de una asociación ilícita y solicitaron que se ampliara la imputación a 913 actos de corrupción, consignó el diario Clarín de Argentina.
La semana pasada Bonadio procesó a Fernández de Kirchner como jefa de una asociación ilícita y ser coautora de recibir dádivas en 22 hechos y de cohecho pasivo en cinco hechos. También solicitó su detención preventiva, pero esta medida no tiene efecto por el fuero que goza la ex presidenta tras ser elegida senadora en 2017.
Los fiscales buscan extender esta indagatoria a más de 900 casos de recibir coimas, debido a la cantidad de información que han reunido a través del expediente de la investigación correspondiente.
“Cristina Elisabet (Fernández de Kirchner) deberá responder en orden a los delitos de asociación ilícita, en calidad de jefa, en concurso real con cohecho pasivo, reiterado en novecientos trece (913) oportunidades”, señala el documento de la apelación.
Además de ampliar la indagatoria sobre Fernández de Kirchner, los fiscales también solicitaron que se procese a un grupo de 8 empresarios que pagaban sobornos a los gobiernos kirchneristas, algunos de los cuales hasta el momento se han acogido a la figura de arrepentido para colaborar con la investigación y evitar penas de cárcel.
Estos empresarios “convergieron, junto a funcionarios públicos del más alto nivel, en la perpetración de un emprendimiento criminal complejo, ideado, planificado y ejecutado, como señaló el Juez, con el objeto de recaudar dinero ilegal con el fin de enriquecerse ilegalmente y de utilizar parte de esos fondos en la comisión de otros delitos”, explica la acusación de Stornelli y Rívolo.
Los cuadernos de las coimas es un caso que se dio a conocer a principio de agosto, luego que se revelaran una serie de textos escritos por Oscar Centeno, quien durante más de 10 años fue chófer de Roberto Baratta, viceministro de Planificación durante el kirchnernismo.
Los textos detallan con meticulosidad montos, recorridos y puntos de recogida y de entrega de maletines con dólares en efectivo, para el pago de sobornos por parte de empresarios a las más altas autoridades de Argentina durante los gobiernos ‘K’ para la adjudicación de licitaciones y proyectos públicos.