El vicepresidente boliviano Álvaro García informó que el país vecino debe pagar por el uso de las aguas de los manantiales del Silala y anunció un presupuesto de "varios millones de dólares" para financiar la demanda de un juicio en La Haya por una salida marítima.

Las obras para aprovechar las aguas de los manantiales del Silala no son de incumbencia de Chile por lo que no se espera ninguna reacción del vecino país sobre este tema, aseguró el vicepresidente Álvaro García, quien añadió que el Estado también dispondrá de “varios millones de dólares” para financiar la demanda judicial orientada a retornar al Pacífico con soberanía.

La gobernación de Potosí inaugura mañana las obras para la construcción de un criadero de truchas, que aprovechará las aguas del Silala; ésta es una de varias iniciativas que perfila ejecutar el gobierno departamental para hacer uso del recurso hídrico que aprovecha Chile a través de un desvío artificial de hace más de 100 años.

“El tema del Silala es un tema de soberanía, no es parte de los espacios de negociación. En el lado de Bolivia, ¿qué hacemos con esas aguas?, es nuestro problema, no tenemos que darle cuenta a nadie. Cuando las aguas salen de nuestro territorio, eso sí se convierte en parte del diálogo”, afirmó la autoridad en una conferencia de prensa.

La Razón reveló este viernes que el canciller chileno, Alfredo Moreno, se reunió con líderes políticos de su país y expresó “desconcierto” por recientes discursos de Morales sobre el mar, y por las últimas acciones bolivianas en el Silala, pese a que el encuentro fue convocado para tratar el litigio entre Chile y Perú.

Como lo aseguró García, el presidente respaldó el 8 de octubre el proyecto de aprovechamiento de las aguas en el norte de Potosí y aseguró que no representaba ninguna “agresión” contra Chile.

La Paz reivindica que las aguas manantiales nacen y mueren en territorio nacional, mientras que Santiago asegura que es un río de curso internacional. No obstante, el país vecino aceptó en 2009 pagar por el 50% del uso del recurso hídrico hasta que un estudio resuelva la propiedad del restante porcentaje.

“¿Qué puede decir Chile sobre lo que estamos haciendo en Potosí?, nada; porque no tiene derecho a decir nada, es un tema de soberanía del Estado boliviano sobre sus recursos naturales. En el momento en que esos recursos naturales cruzan frontera ahí hay un tema de negociación bilateral”, insistió.

El litigio por el Silala es parte de la agenda bilateral de 13 puntos, donde está también la temática marítima. La administración del presidente Evo Morales anunció la decisión de llevar la demanda de una salida soberana al Pacífico a tribunales internacionales ante la falta de respuestas útiles, concretas y factibles por parte de Santiago.

La Dirección Estratégica de Reivindicación Marítima (Diremar) fue creada para encaminar la demanda. García anunció que la Asamblea Legislativa apoyará cualquier requerimiento de la Diremar para cumplir con su misión, incluido el presupuestario.

Informó que la institución solicitó un presupuesto, aunque no precisó el monto, señaló que se trata de “varios millones de dólares”. Santiago presupuestó más de US$14 millones para financiar las acciones tendientes a responder al juicio boliviano.

En este contexto, García reafirmó la importancia de las obras para aprovechar las aguas del Silala, ubicadas en la frontera con Chile. “¿Qué hacemos con esa agua?, no es de incumbencia de Chile, es de incumbencia de los bolivianos, somos los bolivianos los que decimos qué se hace”.