El ministro de Trabajo y Empleo, Manoel Dias, dijo que el país puede finalizar el año con la pérdida de un millón de puestos de trabajo, al acumular ya 985.000 empleos destruidos en los últimos doce meses hasta agosto, fruto de la desaceleración económica del país.

Río de Janeiro. El Gobierno brasileño admitió hoy que el país puede perder este año más de un millón de puestos de trabajo formales, tras conocerse que en agosto se destruyeron 86.543 empleos y en el global del año, más de 572.000.

En una rueda de prensa, el ministro de Trabajo y Empleo, Manoel Dias, dijo que el país puede finalizar el año con la pérdida de un millón de puestos de trabajo, al acumular ya 985.000 empleos destruidos en los últimos doce meses hasta agosto, fruto de la desaceleración económica del país.

Pese a las cifras, Dias intentó mostrar optimismo en relación al empleo y a la recuperación de la economía brasileña. "Es un país diferente del que era hace 12 años. Por esto es mucho más fácil restablecer las inversiones para que el país retome el empleo", comentó.

Sobre la grave crisis económica y política por la que atraviesa el país, Dias comentó que "el Gobierno perdió la batalla de la comunicación", y que el clima de pesimismo dificulta la economía.

"Es imposible hacer una previsión de cuánto durara este período, depende de la evaluación de cada sector, de cada ángulo analizado y de la voluntad política", agregó.