A través de un comunicado conjunto, ambas partes agradecieron a las víctimas haber compartido sus "testimonios, opiniones y propuestas expresadas con mucho valor y franqueza" en la cita de este sábado en La Habana.

El gobierno de Juan Manuel Santos y las guerrilleras Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) ratificaron este domingo en La Habana el compromiso conjunto de trabajar por los derechos de las víctimas del conflicto armado en ese país.

En un comunicado conjunto, ambas partes expresaron que "trabajarán sobre la base de los diez principios rectores acordados, y en particular sobre la base del reconocimiento de los derechos de las víctimas, con el fin de garantizar su mayor satisfacción y dar garantías de no repetición".

Las delegaciones del gobierno y la guerrilla, que protagonizan en la capital cubana un diálogo de paz, escucharon este sábado los testimonios de un primer grupo de 12 víctimas, de las que cinco eran de las FARC, cuatro del gobierno, dos de los paramilitares y una de diversos grupos armados.

Las dos partes destacaron el "ambiente de solemnidad, respeto y atención" en el que se desarrolló el encuentro, y agradecieron a las víctimas haber compartido sus "testimonios, opiniones y propuestas expresadas con mucho valor y franqueza".

"Estos no sólo serán un insumo fundamental, junto con los miles de testimonios y propuestas recogidos en los foros sobre víctimas y para la construcción de acuerdos en el punto cinco, sino que nos ponen de presente, por qué estamos trabajando para el fin del conflicto, la construcción de una paz duradera y la reconciliación", señalaron.

Tras el primer grupo, viajarán a La Habana cuatro más, hasta totalizar 60 víctimas entrevistadas por la mesa de conversaciones que busca el fin del conflicto colombiano.

La reparación de las víctimas es el cuarto de los seis puntos de la agenda de paz y uno de los más complejos, debido a que tanto el gobierno como la guerrilla han admitido responsabilidad en la violencia armada, que ha dejado en medio siglo unos 220.000 muertos y más de cinco millones de desplazados, según cifras oficiales.

Desde noviembre de 2012, el gobierno y la guerrilla instalaron en Cuba, país garante junto a Noruega, una mesa de diálogo para poner fin al conflicto.

El diálogo se basa en una agenda de cinco puntos, y ya se lograron acuerdos parciales en tres: desarrollo agrario integral, participación política y solución al problema de las drogas ilícitas.

Durante el actual ciclo de negociaciones, ambas partes acordaron constituir una subcomisión para empezar a perfilar el punto relacionado con el fin del conflicto.