Los legisladores plantearon que mientras el país centroamericano "haga progresos sustantivos en mejorar su deplorable historial en derechos humanos, creemos inapropiado proveerle asistencia directa". Además solicitaron dejar de impulsar su readmisión en la OEA.
Tegucigalpa. Una treintena de congresistas demócratas pidieron este miércoles al gobierno estadounidense que suspenda la ayuda a Honduras y deponga sus intentos por lograr su reingreso a la OEA, ante lo que consideran persistentes violaciones a los derechos humanos en el país.
Hasta que el gobierno de Honduras "haga progresos sustantivos en mejorar su deplorable historial en derechos humanos, creemos inapropiado proveerle asistencia directa", sobre todo en materia policial y militar, indicaron los legisladores en una carta enviada a la secretaria de Estado, Hillary Clinton.
El gobierno de Porfirio Lobo necesita distanciarse de individuos involucrados en el golpe de Estado de junio de 2009, indicó la misiva redactada por el legislador por California Sam Farr y suscrita también por otros 29 demócratas.
"Hemos recibido informes creíbles de organizaciones de derechos humanos que señalan que los abusos continúan con casi total impunidad", señalaron los congresistas, al destacar que según los reportes desde agosto han sido asesinadas seis personas identificadas con la oposición.
Asimismo, el gobierno de Barack Obama le hace un "flaco servicio a la democracia y los derechos humanos en el continente" al impulsar la readmisión en la Organización de Estados Americanos (OEA) de Honduras, suspendida desde el golpe, por lo que debe parar esos esfuerzos, señaló el documento.
Los congresistas se dijeron "alentados" tras el viaje en agosto a Honduras de una funcionaria del Departamento de Estado que mostró su preocupación por la situación de los derechos humanos, pero afirmaron que Tegucigalpa poco ha hecho desde esa visita.
Washington "debe urgir al gobierno de Lobo a reconocer el carácter innegablemente político de muchos de los ataques contra activistas y periodistas", agregaron los legisladores.
Estados Unidos ha criticado la situación de los derechos humanos en Honduras, pero fue uno de los primeros países que reconoció el nuevo gobierno de Lobo que asumió en enero y ha estado al frente de las gestiones para el regreso del país centroamericano a la OEA.
