"Seguimos en las calles hasta lograr nuestros objetivos (...) lograr la libertad de toda Venezuela", dijo este miércoles Juan Guaidó en un acto en el este de Caracas.
Caracas.- Opositores venezolanos y ciudadanos agobiados por la crisis económica se concentraban este miércoles en las calles atendiendo el llamado del líder de la oposición, Juan Guaidó, a la "marcha más grande" de la historia del país, para empujar a los militares a deponer al presidente Nicolás Maduro.
"Seguimos en las calles hasta lograr nuestros objetivos (...) lograr la libertad de toda Venezuela", dijo el miércoles Guaidó en un acto en el este de Caracas.
Pese a los llamados de la oposición y la comunidad internacional, los altos mandos militares hasta ahora se han mantenido alineados con el gobierno de Maduro y la Guardia Nacional y la policía disolvía el miércoles a pequeños grupos de opositores con gases lacrimógenos.
En su intento más audaz para atraer a las fuerzas armadas, Guaidó apareció el martes por la mañana temprano frente a una base de la fuerza aérea de Caracas con docenas de miembros de la Guardia Nacional, que dio paso a una jornada de protestas violentas que dejaron más de 100 heridos.
El líder opositor dijo que a partir de ahora van a tener jornadas de protestas todos los días y que el jueves comenzarán paros escalonados de empleados públicos.
"La fuerza armada está para hacer cumplir la Constitución, en este caso sacar al usurpador que ostenta en este momento de manera arbitraria, grosera" el poder, dijo Danilo José, un deportista de 37 años.
Guaidó acusa a Maduro de usurpar el poder porque dice que su reelección en mayo del año pasado fue un fraude.
"Tenemos que luchar aun con miedo porque sino lo vamos a perder (el futuro) y creo que esta es la oportunidad", dijo Alfredo Sentían, de 36 años, en Maracaibo, en el noroeste de Venezuela, y una de las ciudades más golpeadas por apagones eléctricos, cortes de agua y escasez de alimentos.
En San Cristóbal, cercano a la frontera con Colombia, Henry Colmenares, de 46 años y propietario de un restaurante, dijo que "la vida de un trabajador venezolano da tristeza (...) nada de lo que uno hace sirve para vivir y mucho menos darle educación a los hijos que es por lo que uno se esfuerza".
Rusia advierte a Washington. Guaidó cuenta con el apoyo de Estados Unidos y la mayoría de los países occidentales, pero la cúpula de las fuerzas armadas sigue detrás de Maduro, al igual que Rusia, China y Cuba.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia rechazó el miércoles la sugerencia de Washington de que persuadió a Maduro para que no huyera ante la crisis política que vive la nación OPEP.
El canciller ruso, Sergei Lavrov, le dijo a su par de Estados Unidos, Mike Pompeo que más medidas "agresivas" en Venezuela crearían una tensión con graves consecuencias.
Pompeo dijo el miércoles en una entrevista televisiva que su país está preparado para adoptar acciones militares para aplacar la continua agitación que vive Venezuela.
Maduro, quien dice que Guaidó un títere de Estados Unidos que quiere derrocarlo, también llamó a sus partidarios a marchar el miércoles por el 1 de mayo.
Desde un salón del Palacio de Miraflores, el presidente dijo el martes por la noche que fueron designados tres fiscales especiales para "interrogar a los participantes" del "intento de golpe" y que trabajarán en las acusaciones penales por "delitos contra la Constitución".
"Llamo a la fuerza armada nacional a unirse cada vez mas", dijo Maduro rodeado de mandos militares.
Las manifestaciones del martes dejaron una persona muerta, 109 heridos y 119 detenidos, dijeron el miércoles en Twitter grupos de derechos humanos.