Instituto de Medicina Legal (IML) de El Salvador recibe información relacionada con la ubicación de cementerios clandestinos utilizados por las principales pandillas en diferentes puntos del Area Metropolitana de la capital.

San Salvador. José Miguel Fortín, director del Instituto de Medicina Legal (IML) de El Salvador, señaló que informantes vinculados con las pandillas están proporcionando información acerca del uso de predios baldíos para esconder los cadáveres de sus víctimas, pese a que en marzo de 2012 se inició una tregua entre las pandillas 18 y Mara Salvatrucha.

En diciembre pasado, la Fiscalía General de la República (FGR) descubrió la fosa clandestina más grande registrada hasta el momento donde han encontrado los restos de 25 víctimas. El cementerio está ubicado en una zona agreste a pocos kilómetros de la capital, pero donde los pandilleros aprovecharon para esconder los cadáveres presuntamente de al menos 50 personas.

"Es uno de tantos cementerios clandestinos. El primero que se abre. Realmente tenemos conocimiento de por lo menos dos más. Todavía no queremos revelar el sitio porque queremos resguardar el lugar en lo posible. Podrían ser hasta cinco cementerios más", afirmó Fortín.

"Los señores fiscales se pondrán de acuerdo, supongo yo, con los policías para ver en qué momento pueden dar la seguridad. El resguardo es importante porque si no los mismos mareros podrían empezar a sacar a los muertos. Y esto es lo que queremos evitar", argumentó.

La semana recién pasada las pandillas Salvatrucha, 18, Mao Mao, Mirada Locos y Máquina reivindicaron la validez de la tregua acordada hace año y medio en un recinto penitenciario.

Pero el último comunicado, que surgió tras una visita al país del embajador de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Adam Blackwell, fue criticada por la prensa local que desconfía de la sinceridad de las pandillas porque el pacto de no agresión nunca abarca a la población.

Blackwell, en calidad de secretario de seguridad de la OEA, dijo que el organismo hemisférico sigue vigilando el desarrollo del pacto entre las pandillas para identificar sus fortalezas y debilidades.

Los pandilleros, sin embargo, sostuvieron que sus células territoriales no interferirán en las elecciones presidenciales que están previstas para el próximo 2 de febrero y donde encabeza las preferencias el partido gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).