La secretaria de Estado de EE.UU. contempla reunirse con la canciller mexicana, Patricia Espinosa, en la ciudad central de Guanajuato, y luego volará a la capital para encontrarse con el presidente Felipe Calderón.
México D.F. La secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, visita México este lunes para conversaciones que se espera estén centradas en los fuertes niveles violencia ligados al narcotráfico que afectan al país latinoamericano.
Clinton se reunirá con la canciller mexicana, Patricia Espinosa, en la ciudad central de Guanajuato y luego volará a la capital para encontrarse con el presidente Felipe Calderón, quien lanzó una ofensiva contra los carteles de narcotráfico cuando asumió el poder en el 2006.
Más de 34.000 personas han perecido en los últimos cuatro años víctimas de la violencia de los cárteles en México, que el Departamento de Estado estadounidense ha descrito como una amenaza a la seguridad nacional.
En un reporte emitido el 12 de enero, Fitch Ratings sostuvo que la situación "parece estar afectando la confianza y las actividades de comercio y minoristas" en México, pero reafirmó la calificación de deuda del país en BBB.
"Ciertamente esta es una amenaza de seguridad nacional", dijo este viernes a periodistas el portavoz del Departamento de Estado P.J. Crowley.
"Uno de los elementos clave de soberanía en cualquier contexto es un monopolio en el uso de la violencia (...) Estas organizaciones criminales internacionales, tienen los activos y las armas y personas que ciertamente pueden desafiar cualquier fuerza de seguridad", aseveró.
Clinton dará un inusual paso al reunirse con su contraparte mexicana fuera de Ciudad de México y pasará buena parte del día con Espinosa en la ciudad colonial de Guanajuato.
Además de la lucha contra los cárteles de la droga, ambas funcionarias discutirán sobre el fortalecimiento de la competitividad de las economías de México y Estados Unidos y los planes para modernizar la frontera entre los dos países.
Después Clinton viajará a la capital mexicana para una corta reunión con Calderón, cuya guerra contra el narcotráfico desató la violencia en todo el país cuando las tropas del Ejército fueron desplegadas para combatir a los cárteles que ingresan drogas a Estados Unidos.