Motocicletas que transportaban dos personas fueron utilizadas en el asesinato de la periodista Luz Marina Paz, el martes último, y del ex asesor de Seguridad Gubernamental Alfredo Landaverde, al siguiente día, en medio de una ola de ataques del crimen organizado, en el cual está involucrada la Policía.
Tegucigalpa. Honduras prohibió que dos personas viajen en una misma motocicleta y se apresta a autorizar la intervención de las comunicaciones, en un intento de responder a una sucesión de asesinatos atribuidos al crimen organizado en ese país, que ostenta una de las mayores tasas de homicidio del mundo.
“El Congreso aprobó el decreto que prohibirá durante seis meses que dos personas se movilicen en una misma motocicleta, que es el transporte, según las estadísticas, que se utiliza en un 90% para perpetrar asesinatos”, citó el sitio digital del Legislativo hondureño.
Motocicletas que transportaban dos personas fueron utilizadas en el asesinato de la periodista Luz Marina Paz, el martes último, y del ex asesor de Seguridad Gubernamental Alfredo Landaverde, al siguiente día, en medio de una ola de ataques del crimen organizado, en el cual está involucrada la Policía.
El presidente del Congreso, Juan Orlando Hernández, anunció que los 128 diputados de cinco partidos que integran el Congreso aprobarán pronto una ley que autorizará a los tribunales a ordenar la intervención de las comunicaciones.
“Nos están pidiendo con vehemencia, así como todos los operadores de justicia penal, que procedamos de inmediato a aprobar la ley que le permite al Estado, por la vía telefónica, escuchar las llamadas de los delincuentes”, dijo el diputado.
También el Congreso se apresta a aprobar la creación de una nueva Policía de investigación a cargo del Consejo de Seguridad, dependiente del presidente Porfirio Lobo, según fuentes legislativas.
El lunes último, el gobierno decretó“emergencia en materia de seguridad pública” para autorizar, por 90 días, el apoyo de los militares a la Policía, desacreditada por el involucramiento de muchos de sus miembros en el crimen organizado.
A partir del 1 de noviembre, Lobo desplegó a los 11 mil miembros de las Fuerzas Armadas a colaborar con la Policía Nacional, que cuenta con 14 mil 500 agentes, en la llamada “Operación Relámpago” para afrontar la ola delictiva.
Los operativos fueron ordenados por Lobo tras descubrirse que miembros de la Policía integraban bandas de sicarios, secuestradores, ladrones de autos, narcotraficantes y extorsionadores.
El involucramiento de sedes enteras de la Policía en el crimen se descubrió luego de que el 22 de octubre último, agentes mataron a dos estudiantes, uno de ellos hijo de la rectora de la Universidad Nacional, Julieta Castellanos.
Pesquisas. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos exigió al gobierno de Honduras investigar de forma “diligente” el asesinato de la periodista Paz, el número 17 contra comunicadores en ese país desde el 2010.