No se descarta que adicionen reforma a las mesas electorales receptoras. El proyecto “no está escrito en piedra”, según diputada.
Hasta el lunes 13 de enero la comisión que evalúa la iniciativa encaminada a reformar la Ley Electoral y de las Organizaciones Políticas presentará su dictamen correspondiente y no se descarta que agregue otros temas que han sido parte del debate nacional.
La Comisión de Dictamen, integrada por Antonio Rivera Callejas, José Alfredo Saavedra, Yuri Sabas, German Leitzelar y Orle Solís, entre otros, se ha reunido con representantes de algunos sectores para buscar un consenso sobre las anunciadas reformas. Fue la diputada nacionalista por Cortés, Welsy Vásquez, quien presentó el martes un proyecto de ley que busca reformar cinco artículos de la Ley Electoral.
Entre las reformas pide crear la figura de los distritos electorales como base para escoger los próximos diputados al Congreso Nacional.
El proyecto de ley conserva el actual “cociente electoral departamental”, bajo el cual se diseñarán geográficamente los distritos electorales que servirán de escenario a las próximas disputas por una curul en el Congreso Nacional.
Estas reformas son consideradas como retroceso en materia de fortalecimiento de la democracia desde el momento en que dice que “los candidatos a diputados a nivel departamental acompañarán la fórmula del candidato presidencial por cada partido político”.
El expresidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Augusto Aguilar, no está de acuerdo con el esquema de los distritos porque se puede prestar para que las campañas sean financiadas con dineros provenientes del narcotráfico.
La proyectista Welsy Vásquez admitió “que esos cinco artículos que he propuesto no están escritos en piedra, hay otros proyectos que pueden salir de estos cinco artículos”.
Uno de los temas que podría ser agregado al dictamen que se conocerá el lunes es el relacionado con la reestructuración de las mesas electorales receptoras, cuya “ciudadanización” demandan algunos partidos políticos, el TSE, la sociedad civil y la comunidad internacional.
Estas organizaciones demandan sacar a los partidos políticos de las mesas y dejar ahí solo a gente escogida por las universidades o las iglesias y que rinda cuentas al TSE.
Los partidos políticos solo tendrían observadores que fiscalizarían la labor de los ciudadanos miembros, dijo el magistrado del TSE, Enrique Ortez Sequeira.
Por su parte, Adán Palacios, de la organización Mirador Electoral, expuso que “el origen del mal” en los procesos electorales está en las mesas, cuyos miembros son generalmente influenciados para trastocar los resultados a la hora de hacer el escrutinio y elaborar las actas.
La proyectista Vásquez informó que la Comisión de Dictamen está anuente a escuchar propuestas de otros sectores para elaborar un documento afinado que será sometido el lunes a consideración de los diputados.
El otro aspecto de la propuesta es trasladar la fecha de las elecciones primarias para el mismo año que se realicen las generales. El proyecto sugiere que se desarrollen en mayo.
Sobre este tema hay casi un consenso, según las indagaciones de El Heraldo. El artículo 116 del proyecto exige a los movimientos y partidos incluir para las próximas elecciones el 50 por ciento de nóminas de mujeres.
El 160 modifica la convocatoria a elecciones, que por ahora se hace seis meses antes de los comicios. Se pide hacerlo cuatro meses antes, tanto en primarias como en generales.
El sorteo para la ubicación en las papeletas se realizará tres meses antes de las elecciones y no cuatro, como está actualmente. Originalmente se hablaba de reformar la Ley del Tribunal Supremo Electoral para crear un tribunal de justicia electoral, pero, por lo menos en el proyecto, no está incluido.