El anuncio es con miras a lograr climas de paz social interno y de amistad con vecinos como Chile, que catapulten al candidato nacionalista a la presidencia en la segunda vuelta electoral del Perú, a celebrarse el 5 de junio.
Lima. El candidato nacionalista Ollanta Humala dijo este martes que buscará consensos políticos dentro y fuera de Perú, con miras a lograr climas de paz social interno y de amistad con vecinos como Chile que lo catapulten a la presidencia en la segunda vuelta electoral.
Humala, un militar retirado que ha moderado su discurso de izquierda, ganó la primera ronda del domingo y disputará el 5 de junio la presidencia con la legisladora amiga del libre mercado Keiko Fujimori, hija del ex presidente Alberto Fujimori.
Para "la segunda vuelta electoral, que para nosotros es el segundo tiempo de un partido, creemos en la necesidad de generar estos consensos con las diferentes fuerzas laborales, gremiales, sociales y políticas", dijo Humala a periodistas.
"Y en ese diálogo nadie es dueño de la verdad", afirmó.
Incertidumbre y temores. La segunda ronda electoral se vislumbra incierta y los peruanos estarían una vez más en la encrucijada de elegir como presidente a un "mal menor", según analistas.
El nacionalista aún asusta a los mercados financieros que temen que cambie las reglas de juego económico de un país que registra tasas espectaculares de crecimiento.
Por su parte, Fujimori ha sido parca tras la elección del domingo, pero también afirmó que buscará consensos con otros partidos.
"Lo que buscamos no es una alianza política con los grupos nacionales, nosotros lo que estamos buscando en primer lugar es un consenso, en ver en qué puntos de los planes de gobierno podemos estar de acuerdo y buscar coincidencias más no alianzas", afirmó la aspirante.
Cualquiera que gane deberá lidiar con un Congreso unicameral fragmentado de 130 miembros, pues según los primeros resultados electorales ningún partido tendrá mayoría.
Diálogo con sector empresarial. Humala dijo que buscará también dialogar con el sector empresarial en Perú para asegurarle que "no está en riesgo la economía" puesto que no planea limitar las inversiones.
"El problema es cómo redistribuimos el flujo de inversiones nacionales y extranjeras que van a llegar al país", añadió.
El candidato refirió que se requiere de un consenso entre el empresariado y el Gobierno para reducir los conflictos sociales, generado porque muchos no han sentido los beneficios de la boyante economía del país. "Necesitamos a través del diálogo establecer la paz social en Perú", acotó.
Los conflictos pondrían en jaque inversiones por US$40.000 millones que se han anunciado para los próximos 10 años en sectores claves como la minería y la energía.
Relación con los vecinos. Respecto a sus vecinos de Latinoamérica, Humala afirmó que será un desafío la integración y a la vez el mejorar la relación bilateral con países como Chile, con el que Perú tiene una diferencia por sus límites marítimos, un caso que está en manos de la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
Las relaciones entre Perú y Chile han sufrido muchos altibajos en su historia y uno de los últimos fue el supuesto espionaje del país vecino a militares peruanos.
Humala dijo que recientemente, en una reunión que tuvo con el presidente Sebastián Piñera, le pidió que el gobierno de Chile se disculpara con Perú por el tema del espionaje y sobre una presunta venta de armas a Ecuador durante un conflicto bélico a mediados de la década de 1990 entre Lima y Quito.
"Nosotros le hemos señalado al presidente de Chile que una actitud correcta, para dar un buen mensaje, para acelerar el mejoramiento de las relaciones bilaterales, es que Chile le dé las satisfacciones a Perú con respecto al espionaje", afirmó.
Asimismo por "el tema de la venta de armas al Ecuador, en pleno conflicto del Cenepa siendo Chile un garante, eso hemos señalado", dijo en declaraciones a la radioemisora local RPP.
El candidato también habló sobre Bolivia, cuyo presidente Evo Morales dijo recientemente que demandará a Chile ante la corte de La Haya en busca de una salida soberana al Oceáno Pacífico, que perdió en una guerra a fines del siglo XIX.
Pese a que dijo el tema es un asunto bilateral, el nacionalista Humala afirmó que "nosotros nos ratificamos en apoyar y hacer todos los esfuerzos para colaborar y cooperar en que Bolivia tenga una salida al mar".
Con relación a Brasil, la mayor potencia de Latinoamérica, Humala reiteró su admiración.
Mientras que se desmarcó una vez más del presidente venezolano, Hugo Chávez, un líder de la izquierda en la región cuyo apoyo, según analistas, lo perjudicó en las elecciones presidenciales que perdió en el 2006.
"En el tema internacional lo que estamos viendo es que tenemos un desafío, como nos integramos al crecimiento de Brasil. El Perú tiene el reto de tener como vecino a una potencia mundial", agregó el candidato.