Ana Jara tiene que presentar su renuncia, junto a todo el gabinete de Gobierno conformado por 18 ministros, y el presidente Humala deberá designar su reemplazo en un plazo de 72 horas y realizar cambios en su equipo si lo cree conveniente.
El mandatario peruano, Ollanta Humala, buscaba el martes a un nuevo primer ministro tras la censura del Congreso a la actual jefa de gabinete debido a acusaciones de espionaje a opositores, un escenario que complica al Gobierno a un año de las próximas elecciones presidenciales.
El Congreso unicameral, donde el oficialismo no tiene mayoría, rechazó casi a la medianoche del lunes otorgar su respaldo político a la primera ministra Ana Jara, algo que no ocurría desde hace cinco décadas en el país.
Ahora Jara tiene que presentar su renuncia, junto a todo el gabinete de Gobierno conformado por 18 ministros, y el presidente Humala deberá designar su reemplazo en un plazo de 72 horas y realizar cambios en su equipo si lo cree conveniente.
Una fuente del Gobierno dijo a Reuters que Jara está a la espera de que Humala encuentre a su reemplazo para presentar su renuncia al cargo, que asumió en julio del año pasado.
Analistas esperan que Humala no cambie al ministro clave de Economía, Alonso Segura, quien tiene el respaldo de los inversores y la comunidad empresarial y que ha puesto en marcha una serie de medidas para frenar la desaceleración productiva del país debido a la caída de sus vitales exportaciones mineras.
Las dudas sobre la conformación del nuevo gabinete han preocupado a los mercados. El sol inició la jornada en baja y rompió la barrera de los 3,1 soles por dólar.. En tanto, la bolsa limeña permanecía estable.
"Este es el Gobierno donde ha habido mayores cambios de ministros, pero lo que preocupa es el lado de las expectativas, porque al final las energías se gastan en resolver problemas políticos y no en tratar de reflotar la economía", dijo el analista principal de la corredora Intéligo, Fernando Ibérico.
El ingreso de un séptimo primer ministro durante el Gobierno de Humala, que asumió en el 2011, genera cierta incertidumbre política a poco más de un año de que culmine el mandato en julio del 2016.
Gobierno diezmado. Asimismo pone en una situación expectante al Congreso porque, si se vuelve a censurar a un nuevo primer ministro, Humala podría aplicar el mecanismo de control constitucional y disolver el Parlamento y convocar a elecciones legislativas.
"Sería descabellado", dijo a Reuters el analista político Manuel Saavedra sobre la posibilidad de llegar a una situación de cierre del Congreso. "Con un Gobierno débil como éste, sin capacidad de gestión, eso no es posible", agregó el experto y director de la firma encuestadora local CPI.
Jara fue acusada por la oposición de permitir que los agentes del servicio nacional de inteligencia espiaran a los políticos no afines a Humala, denuncia que ha negado.
La censura a Jara se produce cuando el apoyo a Humala ha caído a un 25 por ciento, mucho menos de la mitad de aprobación cuando inició su mandato, según la encuestadora Ipsos Perú.
Las denuncias de espionaje aparecieron en la prensa local a inicios de año y el escándalo llevó al Gobierno a anunciar a comienzos de febrero el cierre temporal del ente de inteligencia para realizar una reestructuración del organismo.
Humala afirma que las acusaciones en su contra provienen de políticos que quieren sacar provecho pensando en las elecciones presidenciales de abril del 2016, en la que él está impedido legalmente a buscar un segundo mandato consecutivo.
El pedido para censurar a Jara fue liderado por legisladores de oposición de los partidos de los ex presidentes Alan García y Alberto Fujimori, que se alistan para los próximos comicios.
La censura refleja la debilidad de Humala en el Congreso, donde la alianza oficialista ha perdido apoyo hasta de su aliado, el partido del ex presidente Alejandro Toledo. El partido oficialista Gana Perú tenía 47 legisladores, pero muchos se alejaron por críticas al Gobierno y ahora tiene 34 miembros.
El partido fujimorista, liderado por Keiko Fujimori, hija del ex mandatario, tiene la primera mayoría con 35 miembros. El resto son grupos opositores en el Congreso de 130 escaños.