Francisco Huenchumilla, Intendente de la Novena Región, insistió en que él es el “chivo expiatorio” al que ha recurrido la derecha para cuestionar al ministro del Interior en el Congreso.
“Creo que se hará la interpelación y pasará sin pena ni gloria”, afirmó este jueves el intendente de La Araucanía, Francisco Huenchumilla, respecto del cuestionamiento al que será sometido por parte de la derecha el ministro del Interior, Rodrigo Peñalilillo, el próximo 24 de julio.
El jefe regional insistió en que la acción emprendida por RN y la UDI (partidos de oposición a Bachelet), y que se materializará a las 10:30 horas en la Cámara por parte del diputado José Manuel Edwards, lo usa a él como “chivo expiatorio” para medir fuerzas en una pelea política que radicada el gobierno central y la oposición.
“Esta interpelación es por problemas políticos de Santiago, se usa como chivo expiatorio al intendente de la Novena Región, o sea, es una política de vuelo rasante, una baja política, no es una política de Estado”, espetó Huenchumilla, quien aseguró vivir un escenario distinto en su zona al contar con el respaldo de los alcaldes, consejeros regionales y las directivas regionales de la oposición, como también, de parlamentarios de la Alianza, “salvo excepciones de RN”.
La autoridad regional reiteró que la situación de La Araucanía es un problema grave de Estado, y que por lo tanto, reducirlo a la gestión del titular de Interior y Seguridad Pública y al mismo intendente, por es usar una herramienta jurídica del Poder Legislativo “por razones políticas mediocres”.
Huenchumilla formuló estas declaraciones en La Moneda, tras asistir a la primera reunión Mesa de Políticas Públicas para enfrentar los problemas sociales de la zona mapuche, instancia coordinada por la subsecretaría del interior, los ministerios de Desarrollo Social, Agricultura, Obras Públicas, la Conadi y las intendencias del Bíobío y La Araucanía.
Al respecto indicó que el trabajo se centrará en capacitación, marketing, desarrollo del turismo, etc.