Cuba, Venezuela, El Salvador, Nicaragua y otros países reconocieron el triunfo electoral de Enrique Peña Nieto, mientras el candidato izquierdista lucha porque se recuenten los votos.
La izquierda latinoamericana abandonó a su exponente en México, Andrés Manuel López Obrador, y se volcó en reconocimientos y deseos de trabajar con el ganador de los comicios electorales mexicanos, Enrique Peña Nieto, del viejo Partido Revolucionario Institucional (PRI).
El conjunto de gobiernos izquierdistas latinoamericanos dieron la espalda a López Obrador, cansados de que su representante no acepte las reglas de juego previamente establecidas, y apostó por un viejo jugador con el que siempre se llevaron bien, el PRI, que durante sus 70 años de mandato en México albergó al conjunto de la izquierda latinoamericana e internacional, pasando desde el derrotado por el control del Kremlin
Leon Trosky en su lucha contra Josef Stalin a la muerte de Vladimir Lenin y los vencidos dirigentes republicanos en la Guerra Civil Española que no pudieron con la falange derechista de Francisco Franco hasta terminar con los exiliados izquierdistas latinoamericanos en las décadas de dictadura latinoamericana el siglo pasado.
Como patrón de la izquierda latinoamericana, Cuba dio el tiro de salida cuando su presidente Raúl Castro felicitó a Enrique Peña Nieto del PRI.
Castro no olvida que el viejo PRI toleró sus actividades y permitió la salida del grupo guerrillero desde el Caribe mexicano en botes con la misión de derrocar al dictador Fulgencio Batista.
El mandatario cubano le envió una carta a Peña Nieto, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), en la que le expresó “la voluntad de continuar desarrollando las relaciones de amistad y cooperación” bilateral, dijo esa organización partidista en un comunicado.
Una vez que La Habana, jefe ideológico de la izquierda, da la orden de partida, continuó su fiel admirador, el mandatario venezolano Hugo Chávez, en felicitar al candidato priísta.
Es más, Chávez llamó “presidente electo” a Peña Nieto, a pesar de que López Obrador tilda al priísta de inmoral por hacerse llamar con ese título.
Chávez felicitó al pueblo mexicano por los comicios y “al presidente electo Enrique Peña Nieto por haber vencido en las elecciones del pasado domingo, de acuerdo a los resultados oficiales emitidos por la autoridad electoral mexicana”, señala un comunicado de la Cancillería venezolana.
Además, el texto “reitera la voluntad de Venezuela de trabajar junto a México en la profundización de la cooperación bilateral para la unión de nuestros pueblos”, especialmente en el marco de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
La argentina Cristina Fernández y Daniel Ortega de Nicaragua también reconocieron a Peña Nieto y dejaron a López Obrador con sus llamados a no reconocer a Peña Nieto como ganador pleno de los comicios presidenciales el pasado domingo 1 de julio.
Solo en el camino
Pero López Obrador hace oídos sordos al abandono de parte de sus colegas de la izquierda tropical y mantiene su posición de que hubo fraude y que el PRI “compró” millones de votos.
El sábado pidió a la autoridad electoral de México resolver, antes de pasar al tribunal electoral, los recursos por compra de votos interpuestos contra Enrique Peña Nieto.
La coalición de la izquierda Movimiento Progresista promovió los recursos y busca que el Instituto Federal Electoral (IFE) los resuelva antes de que el proceso llegue al tribunal.
También pedirá al oficial Partido Acción Nacional (PAN) compartir pruebas para denunciar juntos la compra de votos y el excesivo gasto de campaña por parte del Partido Revolucionario Institucional (PRI). “Que el IFE asuma su responsabilidad y que resuelva sobre recursos” para aclarar la presunta entrega de tarjetas para adquirir productos en una cadena de supermercados que hizo el PRI a cambio del voto, dijo en conferencia López Obrador.
Jóvenes marchan
Decenas de miles de personas se manifestaron el sábado en Ciudad de México contra Enrique Peña Nieto, quien obtuvo la mayoría de los votos en la elección presidencial y a quien acusan de haber ganado con el apoyo de las televisoras y la compra de votos.
“Salimos a protestar contra el regreso del PRI al poder”, dijo María Soto, una joven estudiante de 21 años que estudia y que acompañaba los gritos y consignas de rechazo como “¡Fuera PRI!” y “¡México sin Peña!”.
