La comunista Ana Olivera, de la coalición oficialista Frente Amplio, se impuso en la capital uruguaya y será la futura jefa de la intendencia de Montevideo, donde vive la mitad de los 3,3 millones de habitantes de la nación.
Montevideo. La coalición de izquierda que gobierna Uruguay retuvo este domingo la jefatura de la capital del país, que ostenta desde hace 20 años, aunque podría perder el control de otras localidades, según proyecciones de escrutinio.
La comunista Ana Olivera, de 56 años, de la coalición oficialista de izquierda Frente Amplio (FA), se impuso en la capital uruguaya y será la futura jefa de la intendencia de Montevideo, donde vive la mitad de los 3,3 millones de habitantes de la nación.
Según las proyecciones de la empresa local Equipos Mori, la izquierda habría obtenido 45% de los votos en la capital.
Los sectores de centroderecha Partido Nacional (PN) y Partido Colorado (PC) habrían obtenido 21% y 18%, respectivamente, mientras que 13% habría votado en blanco o anulado.
"Venimos de 20 años de gobierno departamental del Frente Amplio en Montevideo y la ciudadanía ha renovado su confianza en esta fuerza política", dijo Olivera al celebrar la victoria.
"El Frente Amplio es más que los partidos de la oposición sumados, eso habla de una evaluación que hacen los montevideanos", agregó quien es la primera mujer electa en la historia de la capital uruguaya para ocupar el cargo de intendenta.
La izquierda, que llegó al poder en la capital por primera vez en 1990, está al frente del gobierno nacional desde 2005, y comenzó en marzo de este año su segundo período consecutivo de cinco años, a cargo de la presidencia del país.
Otras localidades. Según consultoras locales, tras los comicios regionales celebrados en los 19 departamentos del país, además de Montevideo el FA habría ganado en otras tres localidades -Canelones, Maldonado y Rocha- y mantenía posibilidades de imponerse en tres más.
Actualmente, la izquierda gobierna en ocho departamentos.
El PN, que tiene el control de diez departamentos, tendría confirmada la victoria en nueve, aunque podría ampliar su dominio con localidades en disputa.
El PC, por su parte, mantendría el control del único departamento que gobernaba y se encontraba con chances de conquistar otro.