Hope Hicks, de 29 años, había trabajado como modelo hasta que la contrató Donald Trump como ayudante de prensa. El verano pasado ascendió al cargo de directora de comunicaciones de la Casa Blanca.
La jefa de comunicaciones de la Casa Blanca, Hope Hicks, nombrada hace pocos meses, renunciará a su cargo en las próximas semanas, según informaron este miércoles (28.02.2018) medios estadounidenses y confirmó posteriormente la portavoz del Gobierno estadounidense, Sarah Huckabee Sanders. Es una de las colaboradoras que más tiempo ha acompañado al presidente Donald Trump durante su carrera política.
"Hope es sobresaliente y ha hecho un gran trabajo durante los últimos tres años. Es muy inteligente y considerada, así como una gran persona. Extrañaré tenerla a mi lado, pero cuando me consultó para buscar otras oportunidades, lo entendí totalmente", dijo Trump en un comunicado facilitado por la Casa Blanca. "Estoy seguro de que trabajaremos juntos de nuevo en el futuro", agregó el gobernante.
Por su parte, la propia Hicks aseguró que "no hay palabras" para expresar adecuadamente su gratitud al mandatario, y deseó al presidente y a su Gobierno "lo mejor". La exmodelo de Ralph Lauren y ex relaciones públicas, estableció entonces relación con Ivanka Trump, para la que trabajó antes de que su padre, Donald Trump, la contratara como ayudante de prensa durante su campaña política, dando inicio a su rápido ascenso político.
Decisión independiente de su declaración en el Capitolio. Hicks, de 29 años, fue interrogada el martes nueve horas por el Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, que investiga la interferencia rusa en la elección presidencial de 2016. No obstante, según indica el diario The New York Times, citando diversas fuentes conocedoras de sus intenciones, la renuncia no ha tenido que ver con la investigación y su testimonio, sino que llevaba considerando sus opciones de salida desde hace varios meses. "No leer entre líneas", dijo Sanders al dar la noticia. "Es un paso que ella lleva tiempo pensando dar".
En su testimonio admitió que debió decir pequeñas mentiras al servicio del presidente Donald Trump, indicaron los medios. Pero insistió en que ella nunca mintió en cuestiones de relevancia. Hicks es la novia del ex secretario de personal de la Casa Blanca Rob Porter, quien dimitió tras ser acusado de maltrato por dos de sus exmujeres.
Hicks ha sido la cuarta persona en ocupar el cargo de directora de comunicaciones de la Casa Blanca durante el corto mandato de Trump, después de Mike Dubke, Sean Spicer y Anthony Scaramucci. Ayer renunció el número dos de Hicks, Josh Raffel, por lo que no está claro quién va a sustituirla inicialmente al frente de las comunicaciones presidenciales en Washington.