Más de 4.000 personas han muerto desde marzo -incluidos 307 niños- como consecuencia de la represión militar y se cree que más de 14.000 personas se encuentran detenidas, dijo Navi Pillay en una sesión de emergencia del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.

Ginebra. La Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, pidió el viernes a la comunidad internacional que tome medidas para proteger a la población civil en Siria de la "represión brutal" mientras el país se desliza hacia una guerra civil.

Más de 4.000 personas han muerto desde marzo -incluidos 307 niños- como consecuencia de la represión militar y se cree que más de 14.000 personas se encuentran detenidas, dijo Pillay en una sesión de emergencia del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.

"La continua represión brutal de las autoridades sirias, si no se detiene ahora, puede llevar al país a una guerra civil en toda regla. A la luz del manifiesto fracaso de las autoridades sirias para proteger a sus ciudadanos, la comunidad internacional necesita adoptar medidas urgentes y efectivas para proteger al pueblo sirio", sostuvo Pillay.

Pillay, una ex jueza de crímenes de guerra de la ONU, dijo que "la necesidad de responsabilidad internacional tiene una urgencia aún mayor hoy".