El mundo gastó US$1,74 billones en Defensa en 2011, por encima de los US$1,63 billones del año anterior, pero sin cambios en términos reales, teniendo en cuenta los tipos de cambio y la inflación, señaló un informe del Instituto Internacional de Investigación de Paz de Estocolmo.
Estocolmo. Los recortes de presupuesto de los acaudalados países occidentales han terminado con 13 años de aumentos en el gasto militar mundial, pese a las drásticas subidas en esta partida en China y Rusia, según mostró el martes un estudio.
"Los efectos de la crisis económica global, especialmente medidas de reducción de déficit en Estados Unidos y Europa, han puesto fin a la década de aumentos en gasto militar, al menos por ahora", indicó uno de los autores del informe, Sam Perlo-Freeman, del Instituto Internacional de Investigación de Paz de Estocolmo, Sipri.
El mundo gastó US$1,74 billones en Defensa en 2011, por encima de los US$1,63 billones del año anterior pero sin cambios en términos reales, teniendo en cuenta los tipos de cambio y la inflación, señaló el informe.
Ese gasto militar prácticamente plano terminó con 13 años consecutivos de aumentos, y supone un gran contraste con el aumento anual medio del 4,5% entre 2001 y 2009.
"Es demasiado pronto para decir si la cifra del gasto militar en 2011 supone un cambio de tendencia a largo plazo", dijo Perlo-Freeman.
"Aunque es probable que veamos más caídas en Estados Unidos y Europa en los próximos años, la tendencia en Asia, África y Oriente Medio sigue siendo al alza por ahora, y cualquier nueva guerra importante cambiaría el escenario de forma drástica", añadió.
Como porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB), el gasto militar se redujo ligeramente del 2,6% al 2,5%, según este organismo independiente de investigación en seguridad internacional, armamento y desarme.
El gasto militar en Estados Unidos, el que más gasta, cayó un 1,2% en términos reales y alcanzó US$711.000 millones, debido en parte a un largo retraso para acordar el presupuesto fiscal para 2011.
En Europa, los tres grandes -Reino Unido, Francia y Alemania- también rebajaron sus gastos en este departamento, centrándose en equilibrar sus presupuestos fiscales en medio de una crisis de deuda soberana en la zona euro.
Por el contrario, los países menos afectados por la necesidad de austeridad fiscal aumentaron su gasto militar el año pasado, en el caso de Rusia un 9,3% a US$71.900 millones, lo que implica que superó a Reino unido y Francia para convertirse en el tercero que más gasta del mundo.
China, el segundo de la lista, ha elevado su gasto militar en un 170% en términos reales desde 2002, en línea con su auge a la prominencia económica como potencia manufacturera, despertando temores entre sus vecinos y otros grandes poderes.
El gasto militar chino subió el año pasado un 6,7% a US$143.000 millones, pero Sipri señaló que su tecnología militar sigue una o dos generaciones por detrás de la estadounidense, y que hablar de una carrera armamentística en la región podría ser prematuro.