Luego de haber ganado la primera vuelta electoral, la centroizquierdista Sandra Torres tiene un 33,4% de intención de voto y Alejandro Giammattei cosecha el 40,6%, según Gallup. Un sondeo de Tendencias Globales coloca a Torres con una ventaja de 10 puntos porcentuales.
Ciudad de Guatemala. Luego de tres intentos por alcanzar la presidencia de Guatemala, el conservador Alejandro Giammattei está cada vez más cerca de gobernar el país acosado por la violencia y la corrupción, dado el alto rechazo a su rival centroizquierdista Sandra Torres para el balotaje de este domingo.
Sin embargo, ninguno de los dos candidatos puede cantar victoria por adelantado, ya que casi tres de cada 10 encuestados recientemente por la firma CID-Gallup no apoya a ninguno de los postulantes y además se espera una baja participación.
Luego de haber ganado la primera vuelta electoral, Torres tiene un 33,4% de intención de voto y Giammattei cosecha el 40,6%, según Gallup. Un sondeo de Tendencias Globales coloca a Torres con una ventaja de 10 puntos porcentuales.
"Voy a votar por Giammattei porque Sandra (Torres) no me agrada. Lo que queremos para Guatemala es seguridad, mano dura contra los delincuentes", dijo Edwin Rolando, un taxista de 70 años de edad en Ciudad de Guatemala.
Quienquiera que gane este domingo heredará a partir de enero de 2020 un país con un 60% de pobreza y una clase política que ha protagonizado una seguidilla de escándalos de corruptela.
Además, deberá hilar fino con Estados Unidos, su mayor socio comercial, luego de que el saliente mandatario, Jimmy Morales, firmó un polémico acuerdo para que Guatemala actúe como muro de contención para los hondureños y salvadoreños que soliciten asilo en ese país.
Ambos candidatos han criticado el pacto de "Tercer País Seguro" y han pedido que sea revisado por el Congreso, lo que podría retrasar su implementación y obligar a Donald Trump a retomar las amenazas económicas contra Guatemala.
"En la población hay apatía y desconfianza, desinterés muy marcado, eso afecta fuertemente al electorado que no encuentra esperanzas", dijo a Reuters el analista político José Carlos Sanabria. "Es bastante difícil anticipar un ganador".
Un 37,3% de los 1.204 encuestados por CID-Gallup a mediados de julio tuvo una opinión negativa de Torres, exprimera dama del país entre 2008 y 2011.
En las presidenciales pasadas, celebradas en 2015, el rechazo a Torres pesó en las urnas y le facilitó el triunfo a Jimmy Morales. Torres, una empresaria de 63 años del partido centroizquierdista Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), fue perjudicada por una investigación por financiamiento ilícito.
Una baja participación en las ciudades afectaría a Giammattei, quien tienta por cuarta vez consecutiva la silla presidencial. Por el contrario, una baja votación rural -donde se encuentra la mayoría pobre del país-, golpearía a Torres, popular en esa zona por sus programas sociales implementados mientras fue primera dama.
La participación en la primera vuelta de mediados de junio alcanzó el 61,8%, pero Gallup asegura que el domingo apenas un 51% acudirá a las urnas, marcando la menor asistencia en más de una década y sentando las bases para una crisis de gobernabilidad en el volátil país centroamericano.
"Más de lo mismo". En 2016 Morales asumió la presidencia de Guatemala prometiendo acabar con la corrupción y mitigar la pobreza.
Sin embargo, la familia del mandatario fue investigada por supuesta corrupción por la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), respaldada por la ONU, y a la que el mismo Morales terminó echando del país.
"Mi voto será nulo. No me parecen las propuestas de ninguno de los dos candidatos", dijo Julio Hernández, un mecánico de 38 años en la capital del país. "Es sólo esperar qué tipo de mafia nos va a gobernar. De los candidatos actuales sólo se puede esperar más de lo mismo".
Las encuestas colocan a la inseguridad, corrupción y desempleo como los principales problemas para la mayoría de los 17 millones de guatemaltecos. El próximo mandatario enfrentará la difícil tarea de frenar la violencia de las pandillas que ha devastado el país y azuzado la migración a Estados Unidos, socavando las relaciones con la administración de Trump.
Giammattei, un cirujano de 63 años que apenas cosechó el 14% de los votos en la primera vuelta, ha prometido resucitar la pena de muerte, acabar con la "asquerosa corrupción" y colocar un "muro de inversión" en lugar de uno físico en la frontera entre Guatemala y México para frenar la migración.
Torres, cuyo partido será la mayor fuerza en el Congreso con un tercio de las bancas, quiere enviar tropas a las calles para luchar contra las bandas de narcotraficantes y utilizar programas de asistencia social para combatir la pobreza.
"Creo que la diferencia entre Sandra y Giammattei es que ella, aunque robe, cumplirá lo que se proponga porque ya lo demostró", opinó José Valladares, un administrador de empresas de 42 años. "Esa señora gobernó detrás de su esposo (...) ya sabe de administración pública".
