La Organización de Estados Americanos (OEA) refirió que en "esta compleja coyuntura" se debe garantizar la realización de las elecciones generales programadas para el 11 de abril del próximo año.
Lima. La Organización de Estados Americanos (OEA) mostró este miércoles su preocupación por la crisis política en Perú y pidió al Tribunal Constitucional del país andino evaluar la legalidad y legitimidad de recientes decisiones institucionales.
Sin referirse directamente sobre la expulsión del presidente Martín Vizcarra por parte del Congreso, la secretaría general de la OEA dijo que los actores políticos en Perú son responsables de asegurar el funcionamiento democrático del país.
"La SC/OEA reitera que compete al Tribunal Constitucional del Perú pronunciarse respecto a la legalidad y legitimidad de las decisiones institucionales adoptadas, así como sobre las diferencias que pudieran existir en la interpretación de la Constitución", dijo la institución en un comunicado.
El Congreso, dominado por la oposición, destituyó el lunes a Vizcarra en medio de acusaciones de corrupción, alegando que el ahora exmandatario tiene "incapacidad moral" para gobernar, sumiendo al país en una nueva agitación política a cinco meses de unas elecciones convocadas para abril del 2021.
Vizcarra, que ha rechazado las acusaciones, afirma que su expulsión rebasó los limites legales porque actualmente hay una demanda pendiente en la máxima corte para que defina el uso del mecanismo de vacancia presidencial por "incapacidad moral".
El artículo 113 de la Constitución Política de Perú dice que la vacancia del cargo del Presidente de la República puede ser decidido, entre otras razones, por "su permanente incapacidad moral o física, declarada por el Congreso".
Poco despúes de la reacción de la OEA, el Tribunal Constitucional de Perú dijo por Twitter que evaluará el 18 de noviembre en audiencia pública la "demanda competencial" presentado en septiembre por el Gobierno de Vizcarra sobre la vacancia presidencial por incapacidad moral permanente.
La OEA refirió que en "esta compleja coyuntura" se debe garantizar la realización de las elecciones generales programadas para el 11 de abril del próximo año.
"La celebración de estas elecciones constituye un paso esencial para asegurar una nueva etapa en la vida democrática institucional del Perú", dijo la organización.
Tras la expulsión de Vizcarra la toma de mando de Manuel Merino el martes, cientos de personas salieron a las calles de Lima y del interior del país a protestar contra la decisión del Congreso; y se registraron varios enfrentamientos con la policía que tuvo que lanzar bombas lacrimógenas para dispersarlos.
El miércoles no se registraban manifestaciones, pero se ha convocado por redes sociales a nuevas protestas.