Delegaciones diplomáticas como México, Argentina, Perú o Chile indicaron no obstante que sus compatriotas residentes en el país asiático realizan su vida con normalidad y no han recibido noticia de ningún incidente.
Bangkok. La mayoría de las embajadas latinoamericanas mantienen la alerta en Tailandia tras más de una semana desde que los militares tomaron el poder mediante un golpe de Estado, informaron varios diplomáticos a Efe.
Delegaciones diplomáticas como México, Argentina, Perú o Chile indicaron no obstante que sus compatriotas residentes en el país asiático realizan su vida con normalidad y no han recibido noticia de ningún incidente.
"En relación a la comunidad chilena, esta es muy reducida y no ha tenido inconvenientes para continuar desarrollando su vida normal", indicaron fuentes chilenas en un mensaje parecido al de el resto de las embajadas latinas.
En la horas siguientes o días de la asonada militar el pasado 22 de mayo, los gobierno de México, Colombia o Chile emitieron comunicados de condenas al golpe y pidieron la vuelta a la democracia, las elecciones y el respeto de los derechos humanos.
"Esperamos que el diálogo entre las fuerzas políticas democráticas se restablezca y el Reino de Tailandia, una nación amiga, recupere su orden democrático y participativo. Abogamos por el respeto y observancia de los derechos humanos y las garantías constitucionales a todos los ciudadanos tailandeses", decía el comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores colombiano.
Tras el golpe militar, el Ejército derogó la Constitución, excepto los artículos referentes a la monarquía, censuró la prensa, aunque no impide el trabajo de los periodistas, y ha detenido de decenas de políticos, activistas y disidentes.
En su mayoría han sido liberados antes de los siete días que, según la ley marcial, pueden permanecer arrestados sin cargos.
A pesar de la presencia de soldados y protestas eventuales, la vida transcurre con relativa calma en la mayor parte de Bangkok y otras provincias del país, aunque, como indica la Embajada de España, la situación puede tornarse "volátil e impredecible".