José Antonio García Belaunde dijo que Pizango "tiene demandas judiciales y tendrá que responder como cualquier cuidadano peruano", al tiempo que rechazó los comentarios del presidente nicaragüense, sobre que el líder indígena corre peligro en Perú.
Managua. El líder indígena peruano Alberto Pizango,asilado desde el año pasado en Nicaragua, partió este miércoles deregreso a su país, pese a una orden de detención en su contra vinculadaa violentas protestas en la región amazónica en el 2009.
Pizangoquiere retomar en Lima la presidencia de la Asociación Interétnica deDesarrollo de la Selva Peruana, con la esperanza de que las autoridadesperuanas cambien la orden de detención en su contra por una decomparecencia ante los tribunales.
El líder indígena, sobrequien pesan cargos por sedición, conspiración y rebelión, viajó a las7.25 hora de Nicaragua (1325 GMT) con destino a Lima, previa escala enCiudad de Panamá.
El canciller peruano, José Antonio GarcíaBelaunde, dijo que Pizango "tiene demandas judiciales y tendrá queresponder como cualquier cuidadano peruano" al tiempo que rechazócomentarios del presidente nicaragüense, Daniel Ortega, sobre que ellíder indígena corre peligro en Perú.
Pizango llegó en juniodel año pasado a Managua, donde recibió asilo político después deencabezar violentas protestas que dejaron decenas de muertos contra unaley de inversiones, que los indígenas consideran una amenaza para susterritorios en la Amazonia, ricos en recursos naturales.
Laciudad peruana de Bagua fue centro de un cruento enfrentamiento queentre el 5 y el 6 de junio del 2009 dejó unos 33 policías e indígenasmuertos, en la peor protesta contra el gobierno del presidente AlanGarcía.
Luego de los disturbios, las autoridades peruanasdictaron a Pizango orden de detención por varios delitos, entre ellosel de secuestro y sedición, y por incitar esos disturbios.