Los gobiernos deben contribuir para que los jóvenes tengan "un empleo con capacidades de desarrollo pero que, además, les permita (obtener) los ingresos para una vida digna y una atención en salud", señaló la directora para América Latina y el Caribe del Fondo de Población de Naciones Unidas.
La directora para América Latina y el Caribe del Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA), la hondureña Marcela Suazo, considera que Centroamérica necesita invertir en los jóvenes, en su acceso al empleo y en su formación para frenar el flujo de menores que viajan solos a Estados Unidos.
En una entrevista con Acan-Efe en Tegucigalpa, Suazo dijo que "es prioritario" que los estados de la región sean "capaces de proteger e invertir en la niñez y juventud para que puedan desarrollarse en sus países" y, en consecuencia, evitar que emigren a Estados Unidos.
La responsable regional del Fondo de Población señaló que cada país puede tener contextos y situaciones relacionadas con la juventud que hay que atender, pero pidió que los recursos se orienten a garantizar, en primer lugar, "una educación de calidad".
Es necesario "una educación de calidad que les permita (a los jóvenes) desarrollar las habilidades, (los) conocimientos y (las) destrezas para incorporarse en la vida productiva", subrayó Suazo.
Destacó que también es necesario establecer políticas de aseguramiento de un empleo y de calidad de las condiciones de vida, entre otras.
Los gobiernos deben contribuir para que los jóvenes tengan "un empleo con capacidades de desarrollo pero que, además, les permita (obtener) los ingresos para una vida digna y una atención en salud", señaló.
Suazo participó en Honduras en una conferencia internacional sobre migración infantil, convocada por el presidente del país, Juan Orlando Hernández, a la que además asistió el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, y representantes de Centroamérica, México y Estados Unidos.
La responsable regional del UNFPA subrayó que invertir en la juventud para garantizar que "desarrollen su pleno potencial" debe ser "la plataforma" sobre la cual la región debe trabajar "a mediano y largo plazo" para eliminar progresivamente las causas estructurales de la migración forzada.
El crimen organizado y el narcotráfico "son parte de las causas, pero no las únicas" que obligan a miles de centroamericanos a emigrar, y por tanto los Gobiernos deben "tomar las decisiones necesarias" para enfrentar esos flagelos, indicó.
La inseguridad, la pobreza, la falta de oportunidades y el abuso familiar son otras de las razones por las cuales los menores centroamericanos deciden emigrar ilegalmente a Estados Unidos, según Suazo, quien exhortó a Centroamérica a debatir sobre cómo atender "a las personas que no pueden quedarse (en su país) y no tienen a dónde ir".
Según cifras oficiales, en lo que va de año fiscal 2014 (que comenzó en noviembre de 2013), más de 52.000 menores sin acompañamiento de adultos fueron detenidos cuando intentaban entrar ilegalmente en territorio estadounidense, y se prevé que esta cifra roce los 100.000 para finales de 2014.
Suazo enfatizó que la prevención de los embarazos no deseados en adolescentes es otro de los grandes problema que afronta Centroamérica, ya que la mayor parte de las jóvenes que emigran son madres solteras, sin estudios.
"En su mayoría las mujeres que están emigrando son madres solteras que no tienen ninguna otra opción y no ha logrado sus estudios escolares que les permita incorporarse a la vida productiva", explicó.
El 70 % de las niñas y adolescentes centroamericanas que arriesgan su vida al emigrar de manera ilegal a Estados Unidos son "víctimas de violación" en su trayecto, reveló Suazo.
Lamentó, además, que muchas de estas jóvenes abandonaron sus lugares de origen porque "estaban abusadas", situación que no cesa al final del trayecto.
Suazo exhortó a Centroamérica a abordar el problema migratorio de "manera integral", garantizar el respeto a los derechos humanos de los migrantes y "asumir un compromiso compartido".