Los sondeos predicen que ganará el "no" con un resultado posiblemente ajustado, si bien el último de ellos, divulgado por el vespertino "Evening Standard", amplía el margen de victoria de los unionistas a seis puntos.
Millones de residentes en Escocia acudieron este jueves a las urnas para decidir si esta región se independiza del Reino Unido en un reñido referéndum, cuyo resultado puede cambiar a este país y a Europa.
Los sondeos predicen que ganará el "no" con un resultado posiblemente ajustado, si bien el último de ellos, divulgado esta misma tarde por el vespertino "Evening Standard", amplía el margen de victoria de los unionistas a seis puntos, con 53% frente al 47% de los secesionistas.
Los indecisos -entre el 4 y el 10 % del censo, según las encuestas- pueden no obstante inclinar la balanza y ningún bando las tiene todas consigo sobre lo que ocurrirá, más allá de la alta participación en la consulta, constatada hoy en muchas filas a las puertas de los colegios electorales.
Habrá que esperar a este viernes hacia las 6.00 GMT -"la hora del desayuno" según la Comisión Electoral escocesa- para conocer el veredicto de los escoceses, que determinará si se rompe una unión con el Reino Unido que se remonta a 1707 y si nace un nuevo Estado europeo, que podría dar alas a otros movimientos separatistas de Europa.
Algo antes, de madrugada, podría haber ya claros indicios del voto, sobre todo cuando se divulguen los resultados de las dos principales ciudades, Glasgow y Edimburgo.
La pregunta a consulta, consensuada entre los gobiernos de Londres y Edimburgo y que debe marcarse en la papeleta con un "sí" o un "no", es: "¿Debería Escocia ser un país independiente?" y la respuesta marcará el rumbo del Reino Unido.
El primer ministro británico, David Cameron, que autorizó el referéndum convocado por el gobierno nacionalista escocés y podría ver peligrar su puesto en caso de un triunfo del "sí", pasó este jueves el día trabajando en su despacho de Downing Street, en Londres, sin un plan de contingencia ante un eventual triunfo independentista.
Sí lo tienen, no obstante, el Banco de Inglaterra y muchas entidades financieras y grandes empresas, cuyo rechazo frontal a la secesión escocesa parece haber sido determinante en el cambio de dirección de unas encuestas que, hace solo una semana, arrojaban un práctico empate técnico.
El porcentaje de participación tampoco se conocerá hasta este viernes pero se espera que supere el 80 % pues se registró para votar el récord del 97 % por ciento del censo electoral escocés, más de 4,28 millones de personas, ante la trascendencia de la consulta.
Entre ellos 109.000 adolescentes de 16 y 17 años que lo harán por primera vez y más de 600.000 residentes en Escocia que no son escoceses, desde europeos a ingleses o ciudadanos de la Commonwealh, algunos de los cuales se confiesan en el bando de los indecisos.
La jornada electoral ha discurrido entre cielos grises, con tranquilidad y hasta tono festivo en ocasiones, sin que se hayan reportado incidentes en los 2.608 colegios electorales abiertos en toda la región.
Sí ha habido mucha animación, emoción y pasiones, sobre todo por parte de los secesionistas, los más dispuestos a explicar, arropados por banderas escocesas y con pancartas del "sí", que el futuro de Escocia "debe estar en manos de los escoceses".
Así se manifestó este jueves el promotor de la consulta separatista, Alex Salmond, el ministro principal escocés, que pone fin a una larga campaña de casi dos años que lo ha llevado a recorrer cada localidad de Escocia, cuya población total es de 5,3 millones de habitantes, el 8,3 % del Reino Unido.
En el bando de los unionistas el liderazgo lo ha asumido con claridad el ex primer ministro laborista Gordon Brown, que es escocés, desde que las encuestas mostraron a comienzos de septiembre que las distancias se acortaban y el "sí" podía ganar.
Brown, que se ha mostrado confiado en que la "mayoría silenciosa" respaldará este jueves la permanencia de Escocia en el Reino Unido, ha tenido que luchar contra la percepción de la campaña del "no" como negativa, frente al mayor optimismo del "sí".
El recuento comienza esta noche, nada más cierren las urnas a las 21.00 GMT en los 32 distritos electorales escoceses, e incluirá también el voto por correo, otro récord con 789.024 papeletas solicitadas.