El presidente brasileño dijo que quiere apoyar a África y consideró que “Naciones Unidas necesita ser gobernado por un tecnócrata competente, no puedes tener un político fuerte en la ONU".
Foz de Iguazu. El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, dijo este viernes que trabajará en ayuda para África y políticas en América Latina cuando deje su cargo pero que no es la persona indicada como jefe de la ONU.
"Naciones Unidas necesita ser gobernado por un tecnócrata competente, no puedes tener un político fuerte en la ONU", dijo Lula a periodistas cuando fue consultado sobre una propuesta del presidente de Bolivia, Evo Morales, para que lidere el organismo.
"Todos saben que quiero ayudar a organizar los partidos políticos en América Latina, todos saben que quiero llevar las historias exitosas de Brasil para ayudar a los pobres en África", dijo Lula, luego de una cumbre del bloque comercial sudamericano Mercosur.
Durante ocho años en su cargo, Lula, de 65 años, implementó innovadores programas de bienestar social que ayudaron a sacar a millones de la pobreza. También viajó extensamente a África para abrir el comercio y los canales de inversión y proveer asistencia agrícola.
Animado por una creciente economía y su carisma, los índices de aprobación personal de Lula tocaron un nuevo récord de 87%, según mostraron encuestas esta semana.
62% de los encuestados espera que Dilma Rousseff, una sucesora menos carismática que él ayudó a elegir, haga un buen trabajo.
Durante su última cumbre internacional como presidente, Lula fue aclamado por los mandatarios sudamericanos como un líder visionario que debería continuar representando a la región en asuntos internacionales.
"Los hombres que luchan toda la vida son los imprescindibles", dijo el presidente chileno, Sebastián Piñera.
"Fica (quédate, en portugués) Lula", agregó Piñera, imitando un pedido similar que seguidores le dijeron a la leyenda del fútbol Pelé cuando se retiró en el estadio Maracaná de Río de Janeiro a fines de la década de 1970.
Pero el ex líder sindical, que obtuvo notoriedad internacional por su abierta defensa de los países en vías de desarrollo, no se mostró interesado en realizar un trabajo oficial representando al Mercosur ni a la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
"Puedo contribuir sin tener un puesto. Sólo necesito una motivación, la necesidad de desarrollar nuestra amada América Latina", dijo Lula.
El ex trabajador de una fábrica, que regresará a su apartamento en un barrio de clase trabajadora de las afueras de Sao Paulo el 1 de enero, terminó con los ojos llenos de lágrimas en medio de una lluvia de elogios.
