Los expertos consideraron que aún es muy prematuro difundir cifras ya que todavía están procesando sus primeros sondeos tras los comicios del 25 de octubre, en los que Scioli se impuso por una diferencia tan exigua que comprometió sus chances.
Buenos Aires. El candidato de la oposición, Mauricio Macri, aventaja en intención de voto a su rival oficialista, Daniel Scioli, señalaron analistas y encuestadores consultados por Reuters de cara a un balotaje presidencial que podría terminar con 12 años de peronismo de centroizquierda en el poder.
Los expertos consideraron que aún es muy prematuro difundir cifras ya que todavía están procesando sus primeros sondeos tras los comicios del 25 de octubre, en los que Scioli se impuso por una diferencia tan exigua que comprometió sus chances para el balotaje que tendrá lugar en poco más de dos semanas.
Sin embargo, coincidieron en que Macri -el candidato favorito de los mercados- tiene la mayor probabilidad de lograr la presidencia tras el sorpresivo buen desempeño que tuvo en la primera rueda electoral.
"Macri tiene una ventaja en el balotaje. Mejoró su imagen y su posicionamiento porque fue la sorpresa de la elección", dijo Roberto Bacman, titular de la consultora CEOP.
Scioli, del Frente para la Victoria que gobierna el país desde 2003, alcanzó el 36,9% de los sufragios y Macri -de la coalición Cambiemos- el 34,3%, frente al 21,3% de los votos que logró el diputado del peronismo opositor Sergio Massa.
Los votantes de Massa son ahora el botín más deseado por los candidatos. Aunque muchos podrían apoyar al oficialismo, también se espera que en el balotaje haya un fuerte rechazo a la gestión de la presidenta Cristina Fernández, que con su política de fuerte intervención estatal y su áspera retórica generó amores y odios entre los argentinos.
"Va a ser difícil para el oficialismo revertir la tendencia. Nosotros teníamos números (antes de la primera rueda) con una ventaja de Scioli en el balotaje sobre Macri de 3 o 4 puntos, pero con una diferencia inicial de 8 puntos en la primera vuelta", dijo Mariel Fornoni, directora de la consultora Management & Fit.
"Scioli bajó 2 y Macri subió 3 puntos", añadió para explicar que ahora es Macri quien corre con ventaja.
Golpe al peronismo. La elección de octubre significó una agria derrota para el "kirchnerismo" -como se conoce al oficialismo- no sólo por las decepcionantes cifras del comicio presidencial sino porque perdió un distrito clave como la provincia de Buenos Aires, históricamente gobernada por el peronismo y actualmente por Scioli.
"Inmediatamente después de la elección se produjo una ola a favor de Cambiemos, fundamentalmente fruto del triunfo en la provincia de Buenos Aires. Lo que vimos en los primeros números (de los sondeos presidenciales) fue que había una ola ganadora de Cambiemos", afirmó el analista Ricardo Rouvier.
Macri, un ex empresario de centroderecha que ha prometido mantener algunas políticas oficiales -como los subsidios a la pobreza y la gestión estatal de la petrolera YPF- para captar votos independientes, anunció que eliminará de raíz las restricciones sobre los mercados de cambio y de granos.
Scioli, un político moderado y más amigable con los mercados que la presidenta Fernández, anunció modificaciones graduales sobre las regulaciones oficiales que, según empresarios, son la causa de la falta de inversión que sufre el país, lo que derivó en un estancamiento de la economía y una alta inflación.
"Ganó Scioli, pero la sensación en la calle es que ganó Macri. Scioli ha mermado sus posibilidades, que ahora van a depender de cuánto pueda diferenciarse de Cristina (Fernández) y cuán creíble sea eso. Es muy difícil, pero nada es imposible", destacó la analista Graciela Römer.