El ministro de Exteriores venezolano, Jorge Arreaza, apuntó que fue un diálogo "constructivo" y "respetuoso". También aseguró que trataron el informe publicado en septiembre, aunque luego borró el tuit donde aludía a esta parte de la conversación.
La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, y el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, han mantenido una reunión telemática en la que, entre otros temas, han hablado del reciente informe que denuncia crímenes de lesa humanidad en el país sudamericano.
Maduro ha compartido imágenes del encuentro en Twitter, donde ha descrito como "fructífera" la videoconferencia. "Reiteramos la disposición de colaborar con sus oficinas en Ginebra y Venezuela y avanzamos en el establecimiento de un diálogo respetuoso por los Derechos Humanos en nuestro país", ha explicado.
El ministro de Exteriores venezolano, Jorge Arreaza, ha apuntado que fue un diálogo "constructivo" y "respetuoso con la garantía de los Derechos Humanos" en Venezuela. Arreaza también ha asegurado que trataron el informe publicado en septiembre por una misión de investigación independiente de la ONU, aunque ha borrado el tuit donde aludía a esta parte de la conversación, recogido por el diario 'El Universal'.
Los investigadores han concluido que se cometieron ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas, detenciones arbitrarias y tortura en el país sudamericano y señala que los abusos de fuerzas de seguridad y grupos armados chavistas se perpetraron con el conocimiento o incluso la dirección de altos cargos como Maduro.
El Gobierno de Venezuela ha elaborado un informe alternativo donde pretende refutar unas supuestas mentiras de las que ha acusado a organizaciones internacionales. Maduro ha enmarcado estas críticas dentro de un presunto complot promovido por gobiernos críticos con su gestión, en pleno debate también por la inminente celebración de las elecciones parlamentarias el 6 de diciembre.
El mandatario venezolano se ha ofrecido a colaborar con Bachelet con el trasfondo de estos comicios, a los que no concurrirán la mayor parte de la oposición. La Unión Europea lidera los contactos para buscar un posible aplazamiento, al que por ahora se opone Caracas.