Los maquinistas de la Sociedad Nacional de Ferrocarriles Franceses (SNCF) han secundado al 77,3% la huelga, lo que ha desembocado en un tráfico "muy perturbado", con nueve de las 16 líneas de metro de París cerradas y una frecuencia muy baja en otras cinco.
París.- La huelga indefinida en los transportes franceses iniciada el pasado 4 de diciembre ha tenido este lunes de nuevo un seguimiento masivo y ha provocado el colapso en el sistema de transporte de las grandes ciudades como París, con metros y cercanías abarrotados a pesar de la petición expresa de las empresas de transporte de no acudir a las estaciones.
Los maquinistas de la Sociedad Nacional de Ferrocarriles Franceses (SNCF) han secundado al 77,3% la huelga, lo que ha desembocado en un tráfico "muy perturbado", con nueve de las 16 líneas de metro de París cerradas y una frecuencia muy baja en otras cinco.
El clima lluvioso ha provocado así que muchos ciudadanos hayan recurrido al coche, lo que ha deparado casi 600 kilómetros de atascos en la hora punta de la mañana en la región de Isla de Francia, donde se encuentra París.
Con esta nueva muestra de fuerza y después de la presencia el pasado jueves de 800.000 manifestantes en las calles, se mantiene la presión sobre el Gobierno y sobre su iniciativa de reforma de las pensiones.
El proyecto completo será presentado el próximo miércoles, pero los sindicatos temen que se dirija a una precarización enmascarada con la unificación de los 42 esquemas existentes a partir de 2025.
Entre las preocupaciones expresadas por los sindicatos figura que el cálculo de las pensiones se haga en virtud de los ingresos obtenidos toda la vida laboral y la suspensión de planes de prejubilación para funcionarios como trabajadores del transporte público y personal médico.