El presidente mexicano aseveró que el Estado cuenta con nuevas bases para acelerar la transformación del país.
Ciudad de México, Excelsior.com.mx. México está trabajando para eliminar las ataduras que impedían su desarrollo, y quienes representan al país en el exterior deben dar a conocer esto, así lo expresó el presidente Enrique Peña Nieto a los embajadores y cónsules de México reunidos ayer en Palacio Nacional.
"El mundo debe saber que estamos trabajando para eliminar barreras y ataduras, que limitaban nuestro potencial como país”, les dijo a los diplomáticos.
Allí estaban, entre otros, Eduardo Medina Mora embajador de México en Estados Unidos, y José Antonio Meade, secretario de Relaciones Exteriores, así como los ex cancilleres Patricia Espinosa, Jorge Castañeda y Bernardo Sepúlveda.
En la comida con la que cerró la XXV Semana de Cónsules y Embajadores, el mandatario dijo que los diplomáticos tienen la responsabilidad de que el mundo conozca las reformas que se han aprobado y las políticas públicas que están en marcha.
“En ustedes está que el mundo conozca qué es México y qué está haciendo para alcanzar nuevos horizontes, con una clara visión de futuro hoy estamos construyendo la nación de libertades y de oportunidades de desarrollo que merecen los mexicanos” expuso.
Esto para proyectar la imagen del país “más allá de estereotipos o generalidades” les planteó.
En cuanto a la situación de la seguridad en el país, y tras semanas marcadas por las acciones de las autodefensas en Michoacán, planteó que las autoridades trabajan por recuperar la seguridad allí donde se ha perdido y que la inseguridad se circunscribe sólo a algunas regiones.
Crimen focalizado. “Gracias a la acción coordinada de todo el Estado mexicano, la problemática de seguridad comienza a limitarse a zonas específicas del país” comentó.
E inmediatamente después expuso que el combate a la pobreza será uno de los ejes del gobierno federal en 2014.
“Con más programas sociales, mejor infraestructura en telecomunicaciones, salud y una gran reforma para el campo que este año habremos de impulsar, seguiremos combatiendo lo que para este gobierno es una alta prioridad: la pobreza y la desigualdad”, expuso.
Describió al México actual como un país con democracia plena y con la capacidad de vivir transiciones de gobierno en forma ordenada.
Como una nación con instituciones sólidas y con “madurez política para construir acuerdos transformadores”.
En ese sentido, habló de que el año pasado el gobierno federal impulsó reformas político electorales y de transparencia que ya fueron aprobadas.
Sobre la economía de México, expuso que es la segunda economía más grande de Latinoamérica, la cuarta del continente y la 13 a nivel mundial.
Explicó que se tiene estabilidad macroeconómica “desde hace más de 15 años, resultado de una política monetaria autónoma, un tipo de cambio flexible, finanzas públicas sanas y un sistema financiero robusto”.
México, dijo, está comprometido con el libre comercio y comentó que tenemos diez tratados, que abarcan las transacciones comerciales con 45 naciones.
Esos tratados han permitido que los productos mexicanos hayan entrado a un mercado de más de mil 200 millones de consumidores en 45 países.
“Con Estados Unidos nuestro comercio total es del orden de 500 mil millones de dólares anuales. México exporta al país vecino del norte 280 mil millones cada año; es decir, 2.6 veces lo que en su conjunto exportan países como Brasil, Rusia, India y Sudáfrica, sumados” explicó.
Y comentó que la edad promedio de los mexicanos es de 27 años, mientras que la de Estados Unidos es de 37 y la de Japón de 45.
Entre los sectores más destacados de la economía mexicana están la industria automotriz que en 2013 produjo tres millones de autos, afirmó.
Sobre las reformas aprobadas el año pasado, comentó que son las bases para acelerar el crecimiento del país.
“Ahora, en 2014, estamos trabajando para concretar sus leyes secundarias e implementar las reformas para que sus beneficios crezcan gradualmente año con año”, externó el mandatario nacional.
En la comida a la que también asistieron la canciller de Colombia, María Ángela Holguín; de Perú, Eda Rivas Franchini, y el de Chile, Alfredo Moreno, países que junto con México forman la Alianza del Pacífico, el canciller Meade habló de que durante la semana de Cónsules y Embajadores, los titulares de Gobernación, Desarrollo Social, Educación Pública y Hacienda expusieron en términos generales la situación del país a los diplomáticos.
Los temas. Por primera vez en estos 25 años de la semana diplomática, hubo un encuentro de cónsules de México y EU, donde hablaron de la situación de la migración, así como la educación y la innovación tecnológica que comparten las dos naciones.
Meade expuso que el reto para la diplomacia es “lograr que se conozcan bien en el mundo las reformas adoptadas y los cambios que de ella derivarán”.
A la reunión también asistieron ex cancilleres como Rosario Green, Javier Solana y José Ángel Gurría, titular de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos.
Rabasa ve en enmiendas reposicionamiento del país
Las reformas estructurales que ha hecho México en los últimos seis meses lo han reposicionado a nivel internacional y la comunidad de países nos ven ahora como una nación que no sólo le basta abordar el tema de la seguridad, sino también el del desarrollo con un sentido social y global. Estamos recuperando el lugar que nos correspondía en el concierto mundial.
Así lo señaló el embajador de México ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Emilio Rabasa, quien sostuvo además que ahora “se percibe a México como un país en proceso de renovación, de actualización ante los grandes desafíos de este siglo, pero también creo que la política exterior, activa, dinámica, del presidente Peña y del canciller Meade han impulsado este papel de liderazgo en los organismo internacionales y las relaciones internacionales”, sostuvo.
Habló el embajador Rabasa con los medios, luego de participar en un foro sobre las perspectivas de la política exterior mexicana en la Cámara alta en donde recalcó que la disidencia u oposición que se generó por las señaladas reformas no ensombrece, ni disminuye nuestra imagen ante el mundo.
Al contrario, “son un reflejo de una sociedad democrática. No se puede esperar en una sociedad democrática la uniformidad total. Esto sólo acontece en los estados autoritarios, pero en una sociedad como la nuestra, y ése es otro gran mérito de las reformas, haberlas logrado en un término récord de alrededor de seis meses, pero con debate, acuerdos, Pacto por México, discusión y disenso, es un ejemplo en el mundo de cómo podemos hacer las cosas aquí en México”, recalcó.
En el foro también participaron los embajadores Luis Alfonso de Alba y Jorge Lomónaco Tonda, representantes permanentes de nuestro país ante los organismos internaciones con sede en Viena y Ginebra, respectivamente, quienes subrayaron lo impostergable, precisamente, de reposicionar a México en el mundo global, tema en el que coincidió el subsecretario de Relaciones Exteriores, Juan Manuel Gómez.
“México no puede seguir jugando en la escena internacional como un país en desarrollo”, advirtió de Alba Góngora y explicó que la nueva agenda mundial tiene implicaciones para países desarrollados, en desarrollo y de economías medias; y consideró que es aquí precisamente donde a nuestro país le toca un papel importante.
Agregó que lo anterior tiene que ver con el tamaño de nuestra nación, de su economía, con la capacidad de aportación en todos los órdenes y en todos los temas de la agenda. La responsabilidad de México, sostuvo, es salir a otros países, pues existen temas en los que hemos liderado y no hay que apenarse de ser líderes en un número importante de temas.
Por su parte, el panista José Rosas Aispuro, vicepresidente del Senado, indicó que México vive procesos muy importantes por los cambios de carácter legal para permitir que México pueda insertarse de manera más clara y dinámica en los cambios que se dan en el ámbito internaciona