A siete semanas de las elecciones presidenciales y con el viento en contra en las encuestas, la economista de 51 años lanzó sus ataques contra el favorito Partido de Revolucionario Institucional (PRI), tratando de capitalizar votos en una campaña que arrancó salpicada de varios tropiezos.
Veracruz, México. La candidata oficialista mexicana, Josefina Vázquez Mota, acusó a los gobernantes estatales del partido opositor PRI de ser permisivos con el crimen organizado y dio un espaldarazo a la controversial estrategia antinarco del presidente Felipe Calderón, vista como un detonante de la violencia en el país.
A siete semanas de las elecciones presidenciales y con el viento en contra en las encuestas, la economista de 51 años lanzó sus ataques contra el favorito Partido de Revolucionario Institucional (PRI), tratando de capitalizar votos en una campaña que arrancó salpicada de varios tropiezos.
Pero mientras la mujer menuda y moderada hacía campaña proselitista el domingo en el costero estado de Veracruz, en una localidad del norteño estado de Nuevo León fueron hallados en una carretera los restos de 49 personas mutiladas, en uno de los peores episodios que se teme está asociado a los cárteles de la droga.
Vázquez condenó el suceso y dijo que "los estados más violentos hoy en el país son los gobernados por el PRI" y que siete de cada 10 muertos en manos del crimen organizado se dan en esas entidades.
"Si esos homicidios no los tuviéramos ahí, este número de muertos se hubiese reducido de manera muy significativa", agregó.
"Es una señal inequívoca que ha habido omisión, indiferencia y complicidad, que debe ser probada por las autoridades competentes, pero no podemos explicar un avance de esta magnitud del crimen organizado sin las autoridades locales y su indiferencia o en su complicidad", dijo la candidata.
Más de 50.000 personas han muerto y más de 10.000 están desaparecidas en eventos relacionados con la sangrienta violencia del narcotráfico desde que Calderón lanzó una fuerte ofensiva militar y policial contra los cárteles de las drogas en diciembre del 2006, tras asumir el poder.
Aunque políticos opositores, analistas, organizaciones de derechos humanos y familiares de víctimas han cuestionado esa ofensiva, el gobierno sostiene que sin ella el país y todas sus instituciones estuvieran secuestradas por los narcotraficantes.
Vázquez defiende la postura oficial diciendo que Calderón ha tenido sólo casi seis años con la ofensiva, nada comparado con el tiempo que tienen operando los delincuentes.
La abanderada del Partido Acción Nacional (PAN) ha aparecido en reciente sondeos empatada en un lejano segundo lugar con el izquierdista Andrés López Obrador, mientras que el del PRI, Enrique Peña Nieto, está cómodo de puntero para recuperar el poder para su partido..
El PRI perdió el poder central en el 2000, tras 71 años seguidos mandando en México, pero ha mantenido liderazgo regional y actualmente gobierna 20 de los 32 estados de la nación.
Peña Nieto no ha ahondado en una crítica frontal a la estrategia de Calderón y ha dicho que quiere crear una gendarmería nacional para luchar contra el crimen.
No negociar con el crimen. En cambio, Vázquez, quien concedió la entrevista en la habitación de un hotel muy cercano a donde en septiembre fueron abandonados en plena vía pública 35 cadáveres en dos camionetas , defendió el "gran valor y decisión" de Calderón para enfrentar al crimen organizado.
Pese que han sido apresados varios capos de la droga, sostuvo que aún hay que afinar estrategias para combatir el lavado de dinero, ampliar las penas y hasta imponer cadena perpetua para combatir la impunidad y la corrupción, eliminar el fuero y mejorar el sistema de justicia.
"Creo que no podemos descalificar de manera per se la estrategia (de Calderón), la estrategia requiere la corresponsabilidad de los gobiernos locales", dijo.
Vázquez ha insistido en la necesidad de que el país tenga una policía nacional de 150,000 hombres con disciplina militar o militarizada para luchar contra los criminales.
La candidata ha reiterado que no le tiene miedo a luchar contra el crimen organizado y que no pactará con él si ello significaría la vía para pacificar al país.
"Sería lo peor que le puede suceder al país (...), me parece que no solamente es una salida muy falsa sino es totalmente peligrosa (...) No puedo compartir eso", dijo.
Los cárteles de la droga están enfrascados en una cruenta lucha por el control de las rutas del tráfico de drogas, pero buena parte de la violencia se ha concentrado en la región nororiental del país, cerca y sobre la frontera con Estados Unidos.
Tradicionalmente esa zona estaba en control del cártel del Golfo, que ahora enfrenta los embates de Los Zetas, su otrora brazo armado y señalado como autor de las peores masacres durante el actual Gobierno, no sólo de ajustes de cuentas con grupos rivales, sino también de ataques masivos contra civiles.
