Según un informe de la Vicepresidencia, 6.222 militares y 3.779 civiles, entre ellos 968 niños, niñas y adolescentes han muerto por las minas antipersonales que son instaladas en zona rurales del país por los grupos armados.
Bogotá. El vicepresidente colombiano Angelino Garzón aseguró este martes que las minas antipersonales dejaron en los últimos 22 años unas 10.000 víctimas en Colombia, que colocan a la nación sudamericana en una "deshonrosa" posición.
"Niñas, niños, adolescentes, mujeres, indígenas, afrodescendientes, campesinos, obreros, soldados, policías, héroes de la patria que han sacrificado sus vidas por la libertad y seguridad de los colombianos", detalló.
"Este es un homenaje para todos aquellos que se han visto involucrados en una guerra inhumana y sin sentido. Queremos ya una Colombia sin más víctimas de minas antipersonales y libre de estos artefactos", declaró el funcionario.
Según un informe de la Vicepresidencia, 6.222 militares y 3.779 civiles, entre ellos 968 niños, niñas y adolescentes han muerto por las minas antipersonales que son instaladas en zona rurales del país por los grupos armados.
"Todos ellos, todas las víctimas de este flagelo tienen sueños, esperanzas y ganas de seguir adelante. Todos son ejemplos de vida, de superación, de fuerza y de coraje. 10.000 colombianos y familias por quienes debemos seguir trabajando a diario, 10.000 sueños que queremos reconstruir, y muchas esperanzas puestas en un futuro sin más víctimas, sin más violencia y sin más guerra", comentó.
El vicepresidente exigió a los grupos armados ilegales cesar esa práctica de sembrar minas antipersonales en zonas rurales, al tiempo que pidió a esas organizaciones la ubicación de los campos minados.
Garzón recordó que el próximo jueves se realizará el lanzamiento en Bogotá del Convenio de Financiación entre el gobierno de Colombia y la Unión Europea, iniciativa que entregará recursos a las víctimas de las minas antipersonales.