Eleonara Menicucci admitió, horas antes de asumir la cartera de la Mujer, un pasado lleno de escándalos y excesos que, según ella, la ayudarán a luchar de mejor manera por los derechos de las féminas en su país.

Ex guerrillera, divorciada, feminista y, según ella misma ha reconocido, bisexual, se ha estrenado en el cargo presumiendo de haber abortado en dos ocasiones y asegurando que hará todo lo que esté en su mano para "lograr que las mujeres brasileñas puedan abortar sin impedimento legal", son los duros términos con que se refiere a la nueva ministra de la cartera de la Mujer, Eleonara Menicucci, la página web brasileña Infocatolica.

Socióloga y académica de 67 años, la nueva autoridad del gabinete brasileño desató la furia de los sectores más conservadores con sus fuertes declaraciones que, según ella, son vivencias que la ayudarán a luchar de mejor manera por las mujeres de su país.

"Mi lucha por los derechos reproductivos y sexuales de las mujeres, y mi lucha para que ninguna mujer en este país muera por dar a luz, no hacen más que fortalecerme", afirmó Menicucci en su primera declaración como ministra.

Guerrillera. La mujer recordó también que fue compañera de celda de la presidente Dilma Rousseff a inicios de los 70, cuando ambas integraron una guerrilla que combatió a la dictadura militar de ese momento (1964-1985), donde estrecharon los lazos que hoy la llevan a ser parte del gobierno.

"Fuimos presas, torturadas, vivimos en la misma celda. Hicimos un compromiso que nos enseñó a lidiar con las adversidades y nunca huir de las situaciones por más difíciles que sean", según una información recogida por Univisión.

Tanta polémica generó la sinceridad de Eleonara, que horas antes de tomar posesión de su cargo, el grupo de diputados evangélicos del Congreso pidió su destitución, y el legislador Eduarco Cunha, del partido gubernamental PMDB, llegó a decir que Menicucci, más que a esta era, pertenecía a la de "Sodoma y Gomorra".

"Eleonora va a integrar el gobierno más femenino en la historia del país, no sólo porque hay una mujer en la Presidencia y diez mujeres ministras, sino porque (el Ejecutivo) reconoce la importancia de la mujer y sus derechos en la sociedad", fueron las palabras de la mandataria, Dilma Rousseff, en la ceremonia de asunción de la nueva ministra.