Mientras, en Moscú, el primer ministro crimeo, Serguéi Axiónov, aseguró que la autoridad no podrá entrar en Crimea.

Kiev. El ministro de Defensa de Ucrania, Igor Teniuj, y el viceprimer ministro, Vitali Yarema, se dirigen a Crimea para tratar de rebajar la tensión entre las fuerzas rusas y ucranianas, aunque las autoridades crimeas han advertido de que no les dejarán entrar.

"Hace un momento, en la reunión del Gobierno, el primer ministro (ucraniano), Arseni Yatseniuk, dio órdenes a Yarema y Teniuj para que vuelen a Crimea para controlar la situación e impedir que se recrudezca el conflicto y que se convierta en un conflicto armado", informó hoy a los periodistas el ministro portavoz, Ostal Semerak.

Mientras, en Moscú, el primer ministro crimeo, Serguéi Axiónov, aseguró que Yarema y Teniuj no podrán entrar en Crimea.

"En Crimea nadie les espera. Nadie les dejará entrar en Crimea y serán enviados de vuelta", dijo Axiónov citado por la agencia rusa Interfax.

El viaje urgente de los responsables ucranianos a Crimea se produce después de que ayer murieran un militar ucraniano y un miembro de las autodefensas rusas en un confuso incidente en una base militar de cartografía en Simferópol.

Y hoy, en el puerto crimeo de Sebastopol, donde tiene su base la Flota rusa del Mar Negro, una multitud de rusos tomó el cuartel general de la Armada ucraniana, donde izaron la bandera rusa y cantaron el himno de este país.

El comandante de la Flota rusa del Mar Negro, vicealmirante Alexándr Vitko, llegó a ese cuartel general para negociar con sus mandos ucranianos.