Tras la intervención de los 38 senadores, quienes argumentaron en detalle su votación, Harald Beyer resultó culpable de las imputaciones sostenidas por la oposición por no haber fiscalizado el lucro en las universidades privadas y por faltas a la probidad.
Valparaíso/Santiago de Chile, EFE. El ministro de Educación chileno, Harald Beyer, fue destituido este miércoles a última hora después de que el Senado aprobara una acusación constitucional que la oposición presentó por no haber fiscalizado el lucro en las universidades privadas y por faltas a la probidad.
Tras la intervención de los 38 senadores, quienes argumentaron en detalle su votación, Beyer resultó culpable de las imputaciones sostenidas por la oposición y defendidas ante el Senado por el diputado democristiano Fuad Chaín, el socialista Manuel Monsalve y por Marco Antonio Núñez, del Partido por la Democracia.
El pasado 4 de abril, la Cámara de Diputados aprobó en primera instancia la acusación por 58 votos a 56, en una votación cuyo resultado se mantuvo en suspenso hasta el final y este miércoles le correspondía al Senado refrendar o rechazar la iniciativa.
Finalmente, tras una extensa jornada de más de diez horas, la Cámara Alta aprobó esta noche por 20 contra 18 votos la acusación constitucional en contra del ministro de Educación de Chile.
En rueda de prensa y flanqueado por ministros y parlamentarios de la coalición de Gobierno, Beyer dijo que "hoy ha primado la peor cara de la política y lo hace en un área tan sensible como la educación".
"Si algo corresponde hacer en educación es ponernos de acuerdo para poner al centro de las preocupaciones de ministros y parlamentarios, a nuestros niños y jóvenes", añadió el destituido ministro.
Agregó que su defensa demostró claramente la insuficiencia de los argumentos de la acusación constitucional y todos sus errores, y lamentó que igualmente la oposición decidiera votar en contra suya.
"A pesar de los argumentos que se hicieron, ninguno de ellos se recogió. No había el ánimo de recoger los argumentos", enfatizó.
Indicó que independientemente de esta destitución "voy a seguir trabajando por la educación y por mis convicciones, y tratando de aportar al país".
"Esta destitución va a pasar a la historia, pero las reformas que hemos hecho como Gobierno van a quedar para siempre", subrayó.
La destitución de Beyer se vino a sumar a la sufrida en 2008 por la entonces ministra de Educación, Yasna Provoste, que debió dejar su cargo después de que el libelo fuera aprobado por las dos cámaras del Congreso.
Provoste fue acusada constitucionalmente de negligencia ante irregularidades detectadas en el pago de subvenciones escolares por un monto cercano a 600 millones de pesos (alrededor de 1.276.000 dólares).
En tanto, el ministro del Interior, Andrés Chadwick, dijo esta noche que cuesta comprender a los legisladores de oposición, aunque no los nombró directamente.
"Es un día triste cuando vemos que en nuestra democracia triunfa la politiquería y se deja de lado el trabajo serio, por eso es que en el gobierno estamos tristes, nuestra coalición está defraudada, porque se ha cometido un acto de una tremenda injusticia", sentenció.
Chadwick sostuvo que los senadores de la Concertación no respetaron las normas jurídicas (ni) las normas constitucionales.
"No se respeta la legalidad" y se atribuyen, dijo, el papel de sancionar a una persona inocente "a un ministro que ha sido el único y el primero que ha hecho lo que en 30 años, ninguno se atrevió a hacer".
De acuerdo a la Carta Fundamental, la destitución le impedirá al ahora exministro de Educación desempeñarse en cualquier función pública durante los próximos cinco años.