"La quinua es el regalo ancestral de los pueblos andinos que se produce hace más de 7.000 años y se presenta como una alternativa digna ante la actual crisis alimentaria", afirmó el mandatario boliviano durante un acto en la ONU para celebrar el Año Internacional de la Quinua.
Naciones Unidas, EFE. El presidente de Bolivia, Evo Morales, defendió este miércoles la quinua como una "alternativa digna" ante la actual crisis alimentaria mundial frente a la "comida chatarra" del capitalismo.
"La quinua es el regalo ancestral de los pueblos andinos que se produce hace más de 7.000 años y se presenta como una alternativa digna ante la actual crisis alimentaria", afirmó Morales durante un acto en la ONU para celebrar el Año Internacional de la Quinua.
El presidente boliviano denunció que el capitalismo y sus trasnacionales buscan "dominar" los mercados e "imponer" sus gustos con alimentos globales que, según dijo, son producidos "masivamente" con ingredientes químicos que causan "cáncer y otras dolencias".
"En un mundo donde las necesidades alimenticias son un negocio lucrativo, no les interesa la salud de la humanidad sino sus ganancias", dijo Morales, quien acusó a los gobiernos capitalistas, encabezados por EE.UU., de oponerse al Año Internacional de la Quinua.
La Asamblea General de la ONU declaró hoy oficialmente 2013 el "Año Internacional de la Quinua" con el fin de dar a conocer los beneficios nutritivos de este alimento originario de la cordillera de los Andes.
"Se trata de un reconocimiento a las prácticas tradicionales de los pueblos de los Andes que han preservado la quinua en su estado natural para las generaciones venideras en un mundo donde impera el capitalismo", destacó Morales.
El presidente boliviano dijo que la quinua es "un regalo de la madre tierra" que durante décadas se "demonizó" como el "alimento de los indios" y que se convierte ahora en una de las propuestas de los pueblos andinos frente a la crisis alimentaria actual.
"Ahora es visto por las trasnacionales como una amenaza a su imperio de comida chatarra", advirtió Morales, quien añadió que se oponen a su producción alegando que subirán los precios y que buscan que los indígenas "no se beneficien ahora de la quinua".
Frente a los argumentos de esas empresas, el presidente boliviano destacó que la producción de quinua en su país se incrementa cada año, "un 10% más de cultivos", y su consumo se triplicó en cuatro años, "de 4.000 a 12.000 toneladas".
Morales, que destacó el valor nutricional de la planta, destacó que la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) trabajará este año para cambiar "un modelo que ha hecho del derecho de los pueblos a alimentarse un negocio".
Asimismo, defendió la quinua para mitigar el hambre en un mundo que sufre las consecuencias del calentamiento global y la escasez de agua en el que, según vaticinó, habrá "guerras entre países" que se disputen el control de las reservas acuíferas.
"Los saberes ancestrales son una política para frenar el calentamiento global y sus consecuencias, y los gobiernos debemos garantizar más inversión no para ganar más plata sino en beneficio del ser humano", concluyó Morales.
La quinua es una planta de la familia de las amarantáceas que se originó en los Andes hace 7.000 años y fue uno de los alimentos clave de los habitantes de los imperios andinos tiahuanacota e inca, según investigaciones difundidas por la FAO.