Rupert Murdoch rechazó el jueves una citación del Parlamento británico para responder a preguntas sobre supuestos delitos cometidos en uno de sus periódicos, y dejó a una alta ejecutiva de su imperio mediático a cargo de enfrentar a los legisladores.
Londres. Rupert Murdoch rechazó el jueves una citación del Parlamento británico para responder a preguntas sobre supuestos delitos cometidos en uno de sus periódicos, y dejó a una alta ejecutiva de su imperio mediático a cargo de enfrentar a los legisladores.
La policía británica arrestó el jueves a otro sospechoso involucrado en el escándalo, la novena persona detenida desde que una larga investigación sobre la práctica de los periodistas que interceptan mensajes telefónicos de las personas fue reabierta en enero.
Un medio identificó al detenido como un ex editor de News of the World, el periódico que Murdoch cerró por el escándalo de escuchas telefónicas.
Rupert Murdoch y su hijo James, ejecutivo de NewsCorp, han apoyado a la ejecutiva Rebekah Brooks, que dirige el brazo de periódicos de la firma en Gran Bretaña y que fue amiga del primer ministro David Cameron hasta que él se hizo parte de los llamados para que ella dejara su cargo.
Brooks, que editaba News of the World en el momento en que habría ocurrido uno de los supuestos incidentes, acordó el jueves presentarse ante la comisión la próxima semana, pero dijo que la investigación policial podría restringir las declaraciones que pueda realizar.
El Gobierno británico dijo también el jueves que los reguladores deben decidir si el negocio de noticias de Rupert Murdoch puede administrar estaciones televisivas en Gran Bretaña, después de que las acusaciones sobre los ilícitos lo forzaron a retirar su oferta por el operador pago de televisión BSkyB.
Las denuncias, que alcanzaron su punto máximo en momentos en que la oferta de Rupert Murdoch fue presentada este mes para su aprobación, están repercutiendo alrededor del mundo.
Murdoch, que es propietario de un 39 por ciento del operador pago de televisión BSkyB, retiró el miércoles su oferta por 12.000 millones de dólares para adquirir la parte restante que no posee después que los políticos británicos se unieron en una convocatoria para que anulara la oferta.
El viceprimer ministro británico, Nick Clegg, destacó que el regulador de medios OFCOM ya está estudiando si debería permitirse a News Corp, cuyo brazo de periódicos en Gran Bretaña News International está en el corazón del escándalo, mantener su actual participación en BSkyB.
"Claramente hay grandes interrogantes sobre la capacidad y la autenticidad de News Internacional y eso es el motivo por el cual OFCOM está estudiándolo", dijo Clegg, líder de los socios de la coalición liberal demócrata, a Radio 4 de la BBC.
El catalizador de la indignación pública sobre las acusaciones fue un informe que dijo que un diario de News Corp había escuchado los mensajes telefónicos de victimas de asesinatos.
Repercusión global. Algunos legisladores estadounidenses solicitaron una investigación para ver si el multimillonario de News Corp había violado las leyes norteamericanas mientras que en Australia, en donde nació Murdoch, la primer ministro dijo que su Gobierno podría revisar la ley de medios.
"El ver que se han hecho algunas de estas cosas para meterse en la vida privada de la gente, particularmente en momentos de dolor y tensión en la vida de las familias, realmente me ha decepcionado", dijo la primer ministro de Australia, Julia Gillard en el National Press Club de Australia.
"Les anticipo que tendremos una discusión respecto de esto entre los parlamentarios, sobre la mejor evaluación y la manera de tratar todo esto", dijo.
News Corp, que tiene su sede en Estados Unidos, ha sido sacudida por una serie de acusaciones de que periodistas e investigadores contratados para el periódico sensacionalista News of the World irrumpieron en los mensajes telefónicos de miles de personas, desde las víctimas de crímenes a familias de soldados muertos en la guerra en Afganistán.
Las acusaciones, que incluyen pagos a funcionarios policiales para obtener información, lograron que legisladores británicos de todos los partidos se opongan a un hombre que durante mucho tiempo solía ser cortejado por la élite política.
La crisis también han salpicado al primer ministro británico, David Cameron, que se enfrenta a cuestionamientos de por qué designó a un ex editor de News of the World como su jefe de comunicaciones.
Los políticos en Estados Unidos también están tomando nota.
Tres prominentes legisladores estadounidenses solicitaron a los funcionarios federales investigar si News Corp violó alguna ley norteamericana, lo que significaría que Murdoch podría potencialmente estar luchando con investigaciones en ambos lados del Atlántico.