El Observatorio de Periodistas Asesinados de la Unesco registró el año pasado 56 casos, un descenso en relación a los 99 de 2018 y un dato sin precedentes en una década. América Latina, con 22 asesinatos, fue la región más peligrosa en 2019.

Unos 900 periodistas fueron asesinados en todo el mundo entre 2010 y 2019, según un observatorio de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), que ha alertado de los "importantes riesgos" que persisten para la prensa a pesar de la mejora de 2019.

El Observatorio de Periodistas Asesinados registró el año pasado 56 casos, un descenso en relación a los 99 de 2018 y un dato sin precedentes en una década. América Latina, con 22 asesinatos, fue la región más peligrosa, por delante de Asia-Pacífico, con 15, y Oriente Próximo, con diez.

La UNESCO ha advertido de que la vida de los informadores no solo está amenazada en contextos de guerra, ya que seis de cada diez casos corresponden a países en los que no existe un conflicto armado.

La agencia confirma un "notable repunte" de la tendencia y recuerda que en 2014 la cifra de periodistas asesinados fuera de zonas de guerra representaba apenas una tercera parte.

El informe también pone de manifiesto la imperante impunidad, ya que desde 2006 se habrían resuelto menos de uno de cada ocho casos, con una tasa de impunidad del 90%, "escandalosamente alta" a ojos de la UNESCO.

La directora general de la agencia, Audrey Azoulay, ha subrayado que la organización está profundamente preocupada por la hostilidad y la violencia de que son objeto demasiados periodistas en todo el mundo". "Esto socava el debate democrático", ha lamentado.