La infanta Cristina no ha sido por ahora imputada en el proceso, que investiga la presunta apropiación indebida y desvío fraudulento de casi seis millones de euros de fondos públicos por parte de Nóos.
El ex socio del yerno del rey de España, Iñaki Urdangarin, Diego Torres, afirmó este sábado que la esposa de Urdangarin, la infanta Cristina, tomaba decisiones junto con los demás miembros de la junta directiva de la fundación Nóos, envuelta en un escándalo de supuesta corrupción, según publicaron varios medios.
La infanta Cristina no ha sido por ahora imputada en el proceso, que investiga la presunta apropiación indebida y desvío fraudulento de casi seis millones de euros de fondos públicos por parte de Nóos, que presidía Urdangarin.
De acuerdo con diversos medios, el ex socio de Urdangarin, Diego Torres habría declarado al juez que Cristina de Borbón y su asesor Carlos García Revenga, imputado por su papel como tesorero de la fundación, participaban en la toma de decisiones del organismo, en contra de lo sostenido hasta ahora por la defensa de Urdangarin.
Zarzuela (el palacio real) indicó este mes que mantendrá en el cargo a García Revenga, asesor de las dos infantas, por considerar que su imputación responde sólo a garantizar su derecho de defensa.
Urdangarin ha alegado que los contratos que firmó Nóos con diferentes administraciones públicas y que estaban relacionados principalmente con la organización de actos relacionados con el deporte y el turismo fueron correctos, y que no cometió delito alguno.
Además ha afirmado que sólo desempeñaba una función representativa en la sociedad, aunque los medios indicaban el sábado que Torres habría entregado al juez un sobre con documentación que desmentiría este argumento.
Urdangarin y Torres no pagaron este mes la fianza de 8,2 millones de euros impuesta por el juez que instruye el caso, José Castro, que busca ahora embargar sus bienes.
La imputación por corrupción de Urdangarin ha sido uno de los reveses más importantes que ha sufrido la Casa Real en los últimos años, que han llevado a un considerable descenso de la popularidad de la monarquía en un país agobiado por la crisis económica.
La Casa Real ha apartado a Urdangarin de los actos oficiales e incluso de su página web a raíz de su imputación, y el Ayuntamiento de Palma de Mallorca retiró este mes las placas de una calle que llevaba el nombre de los duques de Palma, título que ostentan Cristina y su marido.
