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Obama llega a Cuba para histórica visita que busca profundizar acercamiento EE.UU.-Cuba
Domingo, Marzo 20, 2016 - 09:55

Obama, de 54 años, estará en La Habana desde la tarde del domingo hasta el martes, en la primera visita a la isla de un presidente estadounidense en ejercicio en 88 años.

La Habana. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, buscará llevar a un punto de no retorno el acercamiento con Cuba en su histórica visita a la isla, en la que se reunirá con Raúl Castro, escuchará a disidentes, dará un discurso y disfrutará de una pasión compartida por ambos países: el béisbol.

Obama, de 54 años, estará en La Habana desde la tarde del domingo hasta el martes, en la primera visita a la isla de un presidente estadounidense en ejercicio en 88 años.

En su último año en el poder, y con las amenazas de algunos aspirantes republicanos a la Presidencia de romper relaciones con Cuba, Obama está decidido a que no haya vuelta atrás en el proceso de normalización de ambos países, apenas separados por 145 kilómetros pero enfrentados por décadas.

La visita habría sido impensable antes de que Obama y Castro se comprometieran en diciembre del 2014 a poner fin a un distanciamiento que comenzó cuando los rebeldes barbados liderados por Fidel Castro derrocaron en enero de 1959 a un dictador pro-estadounidense.

Desde entonces, ambos gobiernos han restablecido sus relaciones diplomáticas, firmado acuerdos comerciales, telecomunicaciones y de transporte aéreo, entre otros.

"Nosotros queremos hacer el proceso de normalización irreversible", dijo el miércoles el asesor adjunto de seguridad nacional de Estados Unidos, Ben Rhodes, en Washington.

La visita de Obama era muy esperada por los cubanos, que han visto a su Gobierno comunista sobrevivir a otros 10 mandatarios estadounidenses.

Policías vestidos de civil tienen controlada la seguridad en la capital, mientras que cuadrillas de trabajadores de obras públicas ponen a punto las deterioradas calles de La Habana.

Los carteles de bienvenida con imágenes de Obama junto al presidente Raúl Castro comenzaron a aparecer en La Habana Vieja, una zona colonial que Obama planea recorrer el domingo por la tarde poco después de aterrizar.

"Debo decir que Obama ha sido valiente en acordar las relaciones con Cuba", dijo Elena González, una maestra de una escuela, de 43 años.

A pesar de haber relanzado los vínculos bilaterales, Washington y La Habana aún mantienen profundas diferencias. Los 54 años del embargo económico impuesto por Washington continúan pesando sobre la isla caribeña, y su levantamiento es una de las condiciones que La Habana exige para normalizar por completo los vínculos.

"Son muchos años de desconfianza y no vamos a cambiar nuestro sistema, nuestros valores, aunque sí hay que mencionar que ya no hay invasiones, ni tensiones políticas", dijo Ileana Valdés, una enfermera de 55 años.

Los políticos estadounidenses critican al sistema de Gobierno unipartidista y la represión a los opositores, a quienes La Habana califica de "mercenarios" al servicio de potencias extranjeras.

La policía cubana, por ejemplo, detuvo brevemente a más de 200 opositores en días previos a la visita de Obama, según información de disidentes.

Obama iniciará su visita el domingo reuniéndose con la jerarquía de la Iglesia Católica en Cuba, un importante actor político en la isla de gobierno comunista.

Sin embargo, uno de los aspectos más esperados es el discurso que Obama ofrecerá el martes y que será trasmitido en vivo por la televisión estatal. El martes también planea reunirse con un grupo de disidentes y luego asistir a un partido de béisbol entre el equipo Tampa Bay Rays y la selección cubana.

"Los tiempos cambian y resulta excelente establecer relaciones con Estados Unidos, a pesar de que nos impone un férreo bloqueo (embargo). Pero tampoco podemos echarle toda la culpa de nuestros problemas al bloqueo", dijo un estudiante de medicina.

El martes Obama, acompañado de su esposa Michelle y sus dos hijas, viajará a Argentina en una gira que busca recomponer la relación con Latinoamérica, diez meses antes de que abandone la Casa Blanca.

Autores

Reuters