En una intervención con marcado foco económico y dirigida a la audiencia interna, Obama solo mencionó a México para resaltar que EE.UU. está recuperando empleos procedentes de su vecino del sur y se refirió al Acuerdo de Asociación Transpacífica.
Washington, EFE. El presidente de EE.UU., Barack Obama, volvió este martes a pasar de puntillas sobre los países de América Latina, a los que solo se refirió de pasada al expresar su intención de "completar las negociaciones para un Acuerdo de Asociación Transpacífica", en su primer discurso del estado de la Unión de su segundo mandato.
Obama manifestó su interés en "impulsar las exportaciones estadounidenses, apoyar los empleos estadounidenses y lograr igualdad de oportunidades" a través del Acuerdo de Asociación Transpacífica" (TPP, por si sigla en inglés), que crearía una zona de libre comercio con Asia y el Pacífico, e incluye entre sus miembros negociadores a Chile, Perú y México.
En una intervención con marcado foco económico y dirigida a la audiencia interna, Obama solo mencionó a México para resaltar que EE.UU. está recuperando empleos procedentes de su vecino del sur.
"Ford está trayendo empleos de vuelta desde México", afirmó Obama durante su discurso de poco más de una hora, en la única cita expresa a un país latinoamericano, su gran vecino del sur.
El mandatario dibujó una serie de propuestas para devolver a Estados Unidos a su preponderancia económica y expresó su compromiso de que "la próxima revolución manufacturera será 'Hecho en EE.UU.'".
En política exterior, el presidente estadounidense concentró toda su atención en Oriente Medio y Asia como ejes de la atención de Washington en el futuro próximo.
Los desafíos de Corea del Norte, el programa nuclear de Irán, la situación en Siria y Egipto, las reformas en Birmania o la alianza con su socio Israel fueron los países mencionados explícitamente por Obama.