La iniciativa, presentada por diputados del kirchnerista Frente para la Victoria, propone declarar de "utilidad pública y sujeto a expropiación" el 24% de las acciones de la empresa Papel Prensa que actualmente pertenecen a grupos privados.
Buenos Aires, EFE. Diputados oficialistas argentinos presentaron un proyecto de ley que propone expropiar acciones para convertir al Estado en el principal socio de la única empresa que produce papel para los diarios del país, informaron este viernes a Efe fuentes parlamentarias.
La iniciativa, presentada por diputados del kirchnerista Frente para la Victoria, propone declarar de "utilidad pública y sujeto a expropiación" el 24% de las acciones de la empresa Papel Prensa que actualmente pertenecen a grupos privados.
De aprobarse la propuesta, el Estado, que ya posee el 27% de las acciones, alcanzaría una participación del 51%, convirtiéndose en socio mayoritario y controlador de la empresa, participada, además, por el mayor multimedia del país, el Grupo Clarín (49%), el diario La Nación (22,5%) y accionistas minoritarios (1%).
El diputado oficialista Gastón Harispe explicó a Efe que el proyecto "busca garantizar la compra y venta de insumos" de papel de pasta de celulosa para diarios "en condiciones de equidad para todos los medios gráficos" en lo que se refiere a "calidad, cantidad, precios y distribución".
Harispe apuntó que, en caso de que finalmente se apruebe la ley, el Poder Ejecutivo actuará como expropiante y el Tribunal de Cuentas "fijará la tasación" de las acciones expropiadas.
La propuesta señala además, que tras su aprobación, la Comisión Nacional de Valores convocará a una asamblea de nuevos accionistas, para tratar, entre otros temas, la constitución del nuevo directorio de Papel Prensa S.A.
En diciembre de 2011 el congreso aprobó una ley que declara de "interés público la fabricación, comercialización y distribución de pasta celulosa y papel para diarios", en medio de un duro enfrentamiento del gobierno con los principales diarios del país, que denunciaron una "embestida contra la libertad de prensa".
El gobierno mantiene una relación conflictiva con los socios de Papel Prensa, a quienes acusa de apropiarse ilegalmente de las acciones en 1976, el año en el que comenzó la dictadura militar, y de privilegiar los intereses de los periódicos Clarín y La Nación sobre los de la fabricante de papel, fundada en 1972 y que abastece a unos 170 clientes.
Papel Prensa provee el 75% del consumo de papel para periódicos en Argentina, mientras que el restante 25 % es importado.