Aproximadamente uno de cada 30 ecuatorianos, o medio millón de personas, tienen necesidad de ayuda alimenticia debido a que el sismo interrumpió sus medios de subsistencia, dijo el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU en un comunicado.
Nueva York. Naciones Unidas distribuirá alimentos a más de un cuarto de millón de personas que sobrevivieron al devastador terremoto magnitud 7,8 que azotó a Ecuador este mes y que podrían sufrir de hambruna, dijo este lunes la organización.
La operación de asistencia será desplegada en momentos en que la escala de la catástrofe está siendo evaluada de cerca, más de una semana después del terremoto del 16 de abril que remeció al país sudamericano.
Aproximadamente uno de cada 30 ecuatorianos, o medio millón de personas, tienen necesidad de ayuda alimenticia debido a que el sismo interrumpió sus medios de subsistencia, dijo el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU en un comunicado.
El PMA se prepara para asistir a las 260.000 personas más necesitados entre estas personas, en particular los niños, las personas que se encuentran en refugios y los hospitalizados.
La situación en terreno sigue siendo sombría, dijo el portavoz del PMA, Alejandro Chicheri, a la Fundación Thomson Reuters en una entrevista telefónica.
El número de muertos en la nación sudamericana superó los 650 el lunes.
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"Hay mucha gente en los caminos que está pidiendo ayuda", dijo. "La gente espera recibir asistencia", agregó.
La asistencia de emergencia reforzará las labores del Gobierno y de decenas de trabajadores extranjeros de ayuda que también están distribuyendo alimentos, agua y medicinas en la zona golpeada por el terremoto.
El PMA estima el costo de su operación de tres meses en 34 millones de dólares, una suma que tendrá que provenir de donantes públicos y privados, dijo Chicheri.
El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, anunció el sábado ocho días de luto nacional por las víctimas del terremoto.
El mandatario dijo la semana pasada que el sismo causó entre US$2.000 millones a US$3.000 millones en daños a la economía del país dependiente del petróleo y podría restar entre 2 y 3 puntos porcentuales a su ritmo de crecimiento.
El terremoto de abril fue el peor que el país ha sufrido en su historia, según el PMA.