Julio Borges, el diputado opositor a la cabeza del Congreso, anunció que pedirán a organizaciones no gubernamentales internacionales y organismos multilaterales que auditen con independencia los comicios del domingo último.
Caracas. La oposición de Venezuela planea denunciar en instancias internacionales lo que acusa es un fraude en los comicios regionales del domingo, anunció el presidente del Parlamento de mayoría opositora, quien busca presionar por cambios en el sistema electoral.
Julio Borges, el diputado opositor a la cabeza del Congreso, anunció que pedirán a organizaciones no gubernamentales internacionales y organismos multilaterales que auditen con independencia los comicios del domingo, en los que el oficialismo ganó 18 de las 23 gobernaciones, y cuyos resultados la oposición desconoce.
La estrategia opositora podría provocar más sanciones internacionales contra el gobierno socialista, porque Estados Unidos, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) y 12 países latinoamericanos han apoyado una revisión de los sorpresivos resultados, que contradijeron a todos los sondeos de opinión, que daban ventaja a la oposición.
"Hicimos un gran esfuerzo, nos pusimos la meta de saltar todos los obstáculos y el gobierno lo que hizo fue sofisticar su fraude y su trampa", denunció Borges, que acusó de hipocresía al presidente Nicolás Maduro.
"Tomamos los recaudos completos de lo que ha sido este proceso electoral y lo vamos a entregar a distintas instancias internacionales para que con total independencia, con total objetividad, con total visión desapasionada se someta a una auditoría cualitativa y cuantitativa", agregó Borges, sin mencionar a quienes acudirán.
Maduro defendió el triunfo de los candidatos de su partido y lo consideró una respuesta de los ciudadanos a las violentas protestas que promovieron sus adversarios y dejaron un centenar de fallecidos a mediados de año, sin conseguir ningún cambio.
Los rivales de Maduro dicen que perdieron las gobernaciones por el desánimo de sus seguidores frente a una combinación de trampas, como la de cambiar a última hora los lugares de sufragio de muchos votantes o incluir en las boletas los nombres de políticos de la oposición que perdieron en primarias y no competían.
Dos candidatos de la oposición que perdieron los comicios dijeron el miércoles que impugnarán el proceso. En uno de los casos la oposición dice que tiene pruebas de cómo el árbitro electoral alteró los resultados horas después de cerrada la votación, sin permitir el acceso a testigos.
La presidenta del Consejo Nacional Electoral ha calificado de "impecable" el proceso de votación del domingo. Voceros del gobierno defendieron al árbitro electoral y criticaron que la oposición no cuestionó el resultado en los cinco estados donde resultó ganador.
La oposición busca apoyo internacional para conseguir mejores garantías para la elección presidencial del año que viene, y poder recuperar la confianza de sus seguidores en una salida electoral a la aguda crisis política y económica.