El presidente del Parlamento de Venezuela, Julio Borges, que visita Lima para reunirse con el presidente peruano Pedro Pablo Kuczynski y con representantes del Congreso, afirmó que la crisis humanitaria y el clima de fuertes protestas de su país ha pasado fronteras por la ola de refugiados venezolanos en la región.
Lima. La oposición venezolana busca apoyo de los países de América Latina para imponer junto a la presión internacional una "agenda democrática" al Gobierno de Nicolás Maduro, dijo este jueves el presidente del Parlamento de Venezuela, Julio Borges.
El legislador opositor, que visita Lima para reunirse el jueves con el presidente peruano Pedro Pablo Kuczynski y con representantes del Congreso, afirmó que la crisis humanitaria y el clima de fuertes protestas de su país ha pasado fronteras por la ola de refugiados venezolanos en la región.
"La petición que llevo al Congreso y al Presidente peruano es que nos ayuden, junto a otros presidentes con los que hemos conversado, a crear un gran grupo de presidentes amigos y promotores de la democracia en Venezuela", dijo Borges en declaraciones a Reuters Televisión.
Venezuela vive violentas protestas antigubernamentales desde hace unos 40 días que han dejado al menos 38 muertos. La oposición lidera las manifestaciones contra lo que considera una "dictadura" impuesta por el Gobierno del presidente Maduro en el país petrolero.
Borges afirmó que la estrategia de presión en la calle y el llamado internacional buscan "quebrar la conciencia en las fuerzas armadas y de los grupos políticos" que aún apoyan a Maduro y para que no haya más muertes. La única salida es la apertura hacia una democracia con derechos humanos, dijo.
"Es importante, fundamental, que podamos lograr en el corto plazo que muchos gobiernos de la región se unan para lograr en Venezuela no otra cosa que una agenda democrática y popular", afirmó Borges a la salida de una radio local sin dar detalles del países que ha visitado o visitará.
Borges se reunió el viernes pasado con el asesor de seguridad nacional de Estados Unidos y concordaron en que la crisis política en Venezuela debe ser llevada a una conclusión rápida y pacífica.
Kuczynski es un fuerte crítico de cómo el Gobierno ha manejado la crisis en Venezuela y a fines de marzo anunció el retiro definitivo de su embajador en Caracas luego de la decisión, después derogada parcialmente, del Tribunal Supremo venezolano de adjudicarse funciones legislativas.
Borges dijo antes a la radio local RPP que buscara sumar apoyo de Colombia, Argentina, Ecuador y Brasil. "Hay una nuevo mapa en Latinoamérica que estoy seguro que va a apoyar con mucha contundencia esta agenda democrática para Venezuela", afirmó.
