La visita a Cuba de la orquesta estadounidense The Harvard-Radcliffe tiene "un significado diplomático", dijo su director, en otra señal de que el intercambio cultural promovido por el presidente Barack Obama podría acercar a los viejos enemigos ideológicos.
Santa Clara, Cuba. La visita a Cuba de la orquesta estadounidense The Harvard-Radcliffe tiene "un significado diplomático", dijo su director, en otra señal de que el intercambio cultural promovido por el presidente Barack Obama podría acercar a los viejos enemigos ideológicos.
Federico Cortese, director musical de la orquesta universitaria que se presentó el domingo en la noche en la ciudad de Santa Clara, a unos 270 kilómetros al este de La Habana, dijo a Reuters que la visita está permitiendo que ambas partes "entiendan" que es posible ponerse de acuerdo.
Los conciertos de The Harvard-Radcliffe por varias ciudades, La Habana entre ellas, se inscriben dentro de las medidas recientes del presidente Obama que están facilitando desde enero los viajes por motivos religiosos y académicos a la isla.
"He pensado que para una presentación musical era importante venir a un lugar donde tiene un significado diplomático también", dijo Cortese poco antes de iniciar el concierto el domingo por la noche.
"Es una larga historia de relaciones difíciles entre Cuba y Estados Unidos, quizás es el momento de comenzar con el arte, con la música, con la cultura, con la universidad", agregó el músico de origen italiano.
Cuba y Estados Unidos son enemigos ideológicos desde poco después de la revolución liderada por Fidel Castro en 1959, lo que ha limitado el intercambio bilateral en casi todos los sectores.
Desde que asumió la presidencia en 2008 Obama prometió relanzar las relaciones, pero obstáculos políticos han frenado el acercamiento. El intercambio cultural, en cambio, ha crecido.
Variadas visitas. En los últimos tiempos han aterrizado en La Habana actores estadounidenses como Benicio del Toro, Robert Duvall, Bill Murray, James Caan, Michael Douglas y Sean Penn, o músicos como el trompetista Wynton Marsalis y su orquesta Jazz at Lincoln Center de Nueva York.
Orquestas cubanas como Van Van y La Chararaga Habanera han llegado a Miami y otras ciudades estadounidenses después de años de impedimentos para viajar.
Cortese dijo que éste podría ser "el inicio de una relación normal" y aludió al contenido humano de la visita.
"Es importante que los estudiantes estadounidenses conozcan personalmente a los cubanos y los cubanos conozcan personalmente a los estudiantes estadounidenses, y así ellos entienden que se pueden poner de acuerdo", declaró.
Pese a leves pasos en el acercamiento mutuo tras medio siglo de diferendo, la retórica sigue apuntando a que cada uno espera más del otro.
Obama dijo recientemente que necesita ver más cambios en Cuba para normalizar las relaciones haciendo referencia al plan de reformas económicas impulsadas por el presidente Raúl Castro para salvar al sistema socialista.
Funcionarios cubanos han valorado como positivas las recientes medidas de Obama pero también consideran que no son suficientes.
"Todavía no se resuelven las limitaciones existentes aunque hay que reconocer que se han dado determinados pasos", dijo el sábado a periodistas el viceministro de Cultura, Fernando Rojas, aludiendo al embargo comercial que aplica Washington a La Habana y a la negativa de visados a algunos músicos cubanos este año.