Por segunda vez, el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, se presenta en un binomio formado con su esposa, Rosario Murillo, actual vicepresidenta. Los nicaragüenses están llamados para acudir a las urnas el 7 de noviembre.
El Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) ha ratificado este lunes el binomio formado por el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega,, y la vicepresidenta y también esposa, Rosario Murillo, para concurrir a las próximas presidenciales del 7 de noviembre, marcadas por la detención de varios opositores y candidatos.
"El Congreso del Frente Sandinista de Liberación Nacional ratificó por unanimidad como su fórmula presidencial para las elecciones del próximo 7 de noviembre, al presidente, Daniel Ortega, y a la vicepresidenta, Rosario Murillo", ha informado la emisora La Primerísima.
Se trata de la segunda vez que ambos forman parte de la candidatura del FSLN, después de las presidenciales de 2016 en las que se impusieron con más del 72% de los votos. Anteriormente, Ortega había contado con el conservador Jaime Morales Carazo en 2006 para el puesto de vicepresidente, y ya en 2011, con el que fuera comandante en jefe del Ejército de Nicaragua, Omar Halleslevens.
Durante el acto, celebrado en Managua de manera telemática y presencial, se ha aprobado el programa electoral de la próxima legislatura, así como las veinte candidaturas a diputados de la Asamblea Nacional y otras tantas para el Parlamento Centroamericano.
Unos 4,7 millones de nicaragüenses están llamados para acudir a las urnas el 7 de noviembre, en medio de una de las peores crisis política de los últimos años en el pequeño país centroamericano, con el actual Gobierno de Ortega acusado de perseguir a sus rivales políticos, activistas y periodistas.
La comunidad internacional ha puesto en duda la credibilidad de unos comicios marcados por una reforma electoral que no cumplió con las recomendaciones de las misiones de la Organización de Estados Americanos (OEA) y la UE y por el uso político del sistema judicial para excluir a candidatos e inhabilitar a partidos de la oposición.