En un vídeo publicado en las redes sociales, los padres de los alumnos de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa (estado de Guerrero) recordaron la Navidad del año pasado como una celebración alegre en compañía de sus hijos.
México. Los padres de los 43 estudiantes que desaparecieron en México llamaron este jueves a la comunidad internacional a no olvidarse de sus hijos y presionar al gobierno de Enrique Peña Nieto para que dé respuestas luego de tres meses de incertidumbre.
En un vídeo publicado en las redes sociales, los padres de los alumnos de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa (estado de Guerrero) recordaron la Navidad del año pasado como una celebración alegre en compañía de sus hijos.
Esta Navidad no habrá festejo para ellos, pero tampoco para el gobierno mexicano, al que le exigen resultados en la búsqueda de los jóvenes.
Los 43 estudiantes desaparecieron la noche del 26 de septiembre tras varios ataques a tiros perpetrados por policías municipales y ordenados por el entonces alcalde de Iguala, José Luis Abarca, en los que murieron seis personas y 25 resultaron heridas.
Según la investigación oficial, los jóvenes fueron detenidos por los policías y entregados al cártel Guerreros Unidos, que presuntamente los asesinó e incineró en un basurero de un municipio vecino a Iguala, una versión en la que los familiares no creen.
Epifanio Álvarez, papá de Jorge Álvarez Nava, auguró que esta es "una Navidad muy triste" sin su hijo.
"Vivos se los llevaron y vivimos los queremos. Le exigimos al gobierno que se ponga a buscar o que nos dé respuesta porque ya son tres meses que no sabemos nada de nuestros hijos", señaló.
"Nuestras autoridades no han hecho nada" para recuperarlos, aseguró María Inés Abraján, tía de Adán Abraján, quien exhorta a la comunidad internacional que exija al gobierno de Enrique Peña Nieto una solución a los problemas que viven los municipios mexicanos.
"Les deseamos una feliz Navidad y (esperamos) que no se olviden (...) de nosotros", añadió.
Los padres llevarán a cabo este noche una protesta frente a la residencia presidencial de Los Pinos para exigir la aparición de las víctimas, bajo el lema "Ni Navidad, ni año nuevo. ¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!".
