La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, dijo que el Gobierno no ha desechado su política de "cero tolerancia" contra la inmigración ilegal, pero necesita una "solución temporal" hasta que pueda albergar a las familias de inmigrantes.
Washington. Los padres que cruzan ilegalmente desde México a Estados Unidos con sus hijos no serán enjuiciados por el momento, debido a que el Gobierno tiene poco espacio para albergarlos, dijeron este lunes funcionarios.
El Gobierno del presidente Donald Trump ha prometido juzgar a todos los adultos que crucen la frontera de forma ilegal, pero su política de separar a los niños inmigrantes de sus padres enfrentó duras críticas internacionales, por lo que ahora busca mantener a las familias juntas mientras los mayores de edad esperan juicio.
Eso ha creado un problema de logística sobre cómo alojar a esas familias, y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por su sigla en inglés) de Estados Unidos actualmente no está remitiendo los nuevos casos para que sean procesados, dijeron funcionarios de la agencia.
La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, dijo que el Gobierno no ha desechado su política de "cero tolerancia" contra la inmigración ilegal, pero necesita una "solución temporal" hasta que pueda albergar a las familias de inmigrantes.
"Esto sólo va a durar un tiempo breve, porque nos vamos a quedar sin espacio, nos vamos a quedar sin recursos por mantener a la gente junta. Y estamos pidiendo al Congreso que entregue esos recursos y que haga su trabajo", dijo Sanders a periodistas.
Una fuente de la CBP dijo que espera reanudar pronto las remisiones a enjuiciamiento y aún lo está haciendo con los adultos que son capturados cruzando la frontera de forma ilegal y no tienen niños con ellos.
Trump enfrentó una indignación global este mes, e incluso algunas duras críticas desde el interior de su Partido Republicano, debido a la separación de niños migrantes de sus padres.
El presidente puso fin formalmente a la política de separación familiar el miércoles pasado, pero el Gobierno aún tiene que reunir a más de 2.000 niños con sus padres y no está claro cómo albergará a miles de familias mientras los padres son juzgados.
Al Ejército de Estados Unidos se le pidió que se prepare para albergar hasta 20.000 niños no acompañados en sus bases.
Aunque los republicanos controlan ambas cámaras del Congreso, las diferencias entre moderados y conservadores del partido sobre temas de inmigración han golpeado las posibilidades de que se logre una rápida solución legislativa a la crisis fronteriza.