El trámite apunta a salvar la vida de Rosalía Amarilla de 33 años, quien se encuentra presa en una cárcel industrial de Pekín desde el 2012. Las autoridades gestionan el caso en contacto con consulados de países vecinos, especialmente el de Argentina.
Asunción. El gobierno de Paraguay dijo este viernes que lleva a cabo intensas gestiones para evitar la ejecución de una ciudadana paraguaya condenada a muerte por tráfico de drogas en China, país con el que no tiene lazos diplomáticos.
El trámite apunta a salvar la vida de Rosalía Amarilla de 33 años, quien se encuentra presa en una cárcel industrial de Pekín desde el 2012. Las autoridades gestionan el caso en contacto con consulados de países vecinos, especialmente el de Argentina.
"Estamos avanzando hacia el principal objetivo, que es salvar la vida de la compatriota", dijo el vicecanciller Federico González a periodistas, tras un encuentro con representantes de la fiscalía y otros funcionarios en el Palacio de Gobierno de Asunción.
La paraguaya fue detenida en un aeropuerto de Pekín con más de tres kilos de cocaína oculta en su ropa interior y condenada a muerte poco después. La ejecución de la pena se pospuso hasta el 20 de marzo del 2015.
Su familia asegura que fue víctima de engaños, ya que la mujer viajó a Sao Paulo con la intención de comprar ropa para revenderla en Paraguay. Su caso se trató durante meses como una desaparición.
"Elevamos el nivel de este caso y lo pasamos al área política. Hemos utilizado todos los ámbitos posibles para plantearlo de la manera más directa posible a las autoridades chinas", dijo el director de Derechos Humanos de la cancillería, Juan Miguel González.
Paraguay es el único país de Sudamérica que tiene relaciones diplomáticas con la isla de Taiwán, que China considera una provincia rebelde.
El presidente Horacio Cartes dijo que el caso era su "quebranto número uno". "Ojalá sepamos quién la envió, porque ella fue como 'mula'", comentó.
