Al dar la bienvenida oficial al papa Francisco en Palacio Nacional, el Presidente le dijo que la vocación de México es por la paz y la fraternidad
Ciudad de México. El presidente Enrique Peña Nieto aseguró que las causas del papa Francisco son también las causas de México.
Al dar la bienvenida oficial al papa Francisco en Palacio Nacional, en esta su primera visita apostólica a nuestro país, el mandatario mexicano le dijo que la vocación de México es por la paz, la fraternidad y la justicia.
Su peregrinar será luz y guía para millones de mexicanos, mencionó el Presidente de la República.
El pueblo de México está emocionado y “reconoce al líder sensible y visionario que se está acercando a las nuevas generaciones”, dijo el presidente Enrique Peña Nieto.
En el Patio Central de Palacio Nacional, el mandatario aseveró que Francisco es un Papa reformador en la Iglesia Católica, que va al encuentro de la gente.
La visita Papa trasciende el encuentro entre dos Estados; es el encuentro de un pueblo con la fe y el país lo recibe con los brazos abiertos, manifestó el presidente Peña Nieto.
El mandatario mexicano afirmó que la visita del Pontífice a México, y específicamente a Palacio Nacional, es reflejo de buena relación entre la Santa Sede y México.
"México quiere al Papa por su sencillez, bondad y calidez”, expresó Peña Nieto, luego del encuentro privado que sostuvieron en el despacho presidencial de Palacio Nacional.
El Presidente de la República sostuvo que la presencia del papa Francisco en México contribuye a reafirmar nuestra voluntad colectiva por la paz y la fraternidad, por la paz y la justicia, porque “las causas del Papa son también las causas de México”.
Le dijo también al jefe del Estado Vaticano que el peregrinar del Papa será histórico, de luz y guía para millones de mexicanos.
El mandatario hizo notar que, si bien el Pontífice dejará su marca en los mexicanos, también “México dejará una profunda huella en el corazón del Papa”.
Antes, a la llegada del Pontífice a Palacio Nacional, al pie del papamóvil Su Santidad fue recibido por el Presidente de la República acompañado por su esposa Angélica Rivera de Peña.
Como parte de la ceremonia se entonaron los himnos nacionales de México y del Vaticano, seguido de la presentación de las comitivas presidencial y del Santo Padre.
Ambos jefes de Estado sostuvieron una reunión privada en el despacho presidencial, donde intercambiaron obsequios.
El Presidente le hizo entrega de un par de artesanías del Estado de México: un árbol de la vida con fotografías del Sumo Pontífice y sus familiares, además de un rosario.
Durante esta ceremonia, el papa Francisco saludó a los representantes de los Poderes de la Unión: los presidentes de la Cámara de Diputados y de Senadores, así como el de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
A Palacio Nacional asistieron los presidentes de los tres principales partidos políticos: PAN, PRI y PRD.
Entre los empresarios se encontraban Olegario Vázquez Raña, Olegario Vázquez Aldir, Miguel Alemán Magnani, Patricio Slim, Carlos Ruiz Sacristán, Alejandro Martí, Valentín Diez Morodo, así como Juan Francisco Ealy Ortiz.
El presidente Peña Nieto ofreció su mensaje ante cerca de 2 mil invitados especiales reunidos en el patio central de Palacio Nacional, entre gobernadores, funcionarios, empresarios y distintos personajes de la sociedad civil.
